La Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP) ha presentado su ‘Informe del Observatorio de la Atención al Paciente 2022’, que en esta edición se ha centrado en el abordaje de la cronicidad compleja en España. Carina Escobar, presidenta de la Plataforma, ha recordado que “la cronicidad está estrechamente relacionada con el envejecimiento de la población”. En España, el 70 % de la población mayor de 65 años tiene al menos una enfermedad crónica, con una elevada presencia de pluripatología y morbilidad.
En consecuencia, se prevé que las estadísticas sigan aumentando en los próximos años. Según el documento presentado, en 2020 el 54,3 % de la población española de 15 y más años tenían diagnosticado algún problema o enfermedad crónica (21.696.500 personas).
Las enfermedades más prevalentes son las del sistema circulatorio (35,3 %), la hipercolesterolemia crónica (15,5 %), la artrosis (15,1 %), el dolor lumbar crónico (14,7 %), el dolor cervical crónico (12,3 %), la migraña (7,64 %) y la diabetes (7,54 %)1.
El acto ha contado con la colaboración de: AbbVie, AMGEN, Boehringer Ingelheim, GSK, Janssen, MSD, Novartis, Novo Nordisk y Sanofi.
Carina Escobar ha pedido más protagonismo para estos pacientes frágiles “en las agendas sanitarias y sociales”. Según ha dicho, la asistencia se centra en un enfoque únicamente clínico, sin tener en cuenta suficientemente los aspectos emocionales y sociales de las personas en situación de vulnerabilidad”.
Un nuevo enfoque de la atención a la cronicidad compleja, según la presidenta, requiere de una detección precoz de la fragilidad. También es necesario un abordaje integrado por parte del sistema sanitario y social. Este manejo debe ser interdisciplinar y coordinado con todos los agentes participantes en el proceso del cuidado.
Personas más frágiles y vulnerables
Carina Escobar ha pedido más protagonismo para estos pacientes frágiles “en las agendas sanitarias y sociales”. Según ha dicho, la asistencia se centra en un enfoque únicamente clínico, sin tener en cuenta suficientemente los aspectos emocionales y sociales de las personas en situación de vulnerabilidad”.
Un nuevo enfoque de la atención a la cronicidad compleja, según la presidenta, requiere de una detección precoz de la fragilidad. También es necesario un abordaje integrado por parte del sistema sanitario y social. Este manejo debe ser interdisciplinar y coordinado con todos los agentes participantes en el proceso del cuidado.