La
dislipidemia es uno de los
factores de riesgo cardiovascular más frecuentes en España. En mayores de 18 años, su prevalencia ronda el 50% de la población, pero muchos de los afectados no conoce sus niveles de colesterol. Además, de ese 50% solo el 23,7% está con tratamiento y controlado el 13,2%.
Para intentar mejorar esta situación, la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN) y la Sociedad Española de Farmacia Clínica, Familiar y Comunitaria (SEFAC) han desarrollado el
Protocolo de dislipemias. Manejo compartido entre médicos de familia y farmacéuticos comunitarios, que ha contado con el patrocinio de la
Fundación Viatris, con el fin de detectar y derivar de forma más precoz al paciente con dislipemia.
Tal y como ha indicado José Polo García, presidente de SEMERGEN, en la presentación del documento, “dicho protocolo es un punto de inicio para el buen control del
paciente crónico, ya que el grado de control de los pacientes con
dislipemia ronda el 33%, una cifra muy baja, que es mejorable”.
Detección precoz
Por eso, insiste al afirmar que “la
farmacia comunitaria tiene un papel destacado en el control de los pacientes, sobre todo en la
modificación del estilo de vida, en la detección de la
inercia terapéutica y en mejorar la
adherencia al tratamiento”.
Por su parte, Vicente J. Baixauli, presidente de SEFAC, ha destacado la importancia de derivar a los pacientes una vez que se detecta la
dislipemia en la farmacia. Así, con el protocolo en la mano, el farmacéutico tiene unos criterios claros de derivación que aplica y que permite la continuidad asistencial.
También con el protocolo, en palabras de Baixauli, se pretende atajar el infradiagnóstico con el cribado que se hace desde la farmacia.
Papel de la farmacia
En este sentido, Jesús C. Gómez, presidente de la Comisión Ejecutiva de la Fundación SEFAC, ha dicho que la farmacia comunitaria tiene tres papeles clave en el control del
colesterol (c-LDL): la educación sanitaria, el cribado y el refuerzo de la adherencia.
En las farmacias se pueden hacer cribados para detectar niveles elevados de
colesterol que son importantes a la hora de derivar al paciente.
Esos cribados se están llevando a cabo en campañas promovidas desde la Fundación SEFAC, en colaboración con la Fundación Viatris. El año pasado participaron 231 farmacias, donde se analizó el
colesterol a 845 personas mayores de 40 años. Casi un 40% de las personas que se midieron el
colesterol (c-LDL) fueron derivadas al médico de primaria o a un especialista. A más del 20 % se les instauró un tratamiento, donde la
estatina fue la más prescrita por el médico de familia. También se les propuso tomar un complemento alimenticio, como los que tienen base de levadura de arroz rojo y otros componentes.
Entre el 9 y el 31 de mayo empieza la campaña de este año, donde según ha manifestado Jesús C. Gómez, se espera una respuesta masiva por parte de las farmacias. En el mes de octubre se podrá disponer ya de los datos del cribado de este año.
Voz de los pacientes
Los pacientes también han tenido voz en la presentación del protocolo. Maite San Saturnino, presidenta de Cardioalianza, ha resaltado la importancia de la detección precoz de la dislipemia y por eso, es importante realizar campañas de
detección precoz del riesgo. Las farmacias pueden ser un buen lugar de detección. “Desde las organizaciones de pacientes insistimos en el control del riesgo y realizamos también acciones de información y concienciación”, ha indicado la presidenta de Cardioalianza.
Educación en salud, prevención y diagnóstico precoz
El protocolo de dislipemias ha contado con el patrocinio de la Fundación Viatris. Javier Anitua, su director, ha recordado que sus principales líneas de actuación son la
educación en salud, con la promoción de hábitos de vida saludables; la
prevención y el
diagnóstico precoz.
“Dentro del compromiso de la prevención cardiovascular destaca nuestro esfuerzo en aportar soluciones contra las
enfermedades cardiovasculares a través de patrocinios de documentos, como el protocolo de dislipidemias SEFAC-SEMERGEN, y en campañas que promueven la educación y prevención de las enfermedades crónicas”, ha apuntado Javier Anitua.