La digitalización debe centrar sus esfuerzos en los pacientes con dolor crónico

El Foro sobre el Impacto Social del Dolor (Societal Impact of Pain - SIP) en España se celebra, en esta ocasión de manera virtual. El evento está organizado por la Sociedad Española de Dolor (SED), y cuenta además con el aval de la Sociedad Española de Calidad Asistencial (SECA) y de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM). Uno de los temas claves de este encuentro es como la digitalización es clave en el abordaje de los pacientes con dolor crónico. El Foro SIP España tiene como objetivo ahondar en todas las cuestiones que afectan al abordaje del dolor por parte de reconocidos expertos nacionales e internacionales. En esta ocasión, además de la digitalización, se tratarán otras cuestiones. entre las mismas destaca como el dolor crónico es la primera causa de absentismo laboral y discapacidad en la UE. También el dolor asociado al proceso oncológico. En este sentido, destaca la necesidad de trabajar de forma conjunta para promover políticas que reflejen la conexión entre el dolor y el empleo. Este un fenómeno transversal que afecta no solo a la persona que lo padece, sino también a su entorno familiar. Incluso, a las estructuras sanitarias y de apoyo social.

Digitalización en los pacientes con dolor crónico

En este foro intervenía Mónica Mayo, médico anestesiólogo de la Unidad de Dolor del Área Sanitaria de Vigo. La experta celebra que la pandemia haya acelerado “el desarrollo y la implementación de la digitalización de los servicios sanitarios”. Sin embargo, también ha hecho hincapié en que la velocidad a la que se han producido estos cambios no ha permitido, en muchos casos, una adecuada adaptación funcional y de regulación. 'La digitalización de las consultas médicas debemos entenderla como una modalidad complementaria que no reemplaza al acto asistencial presencial”, apunta. En este sentido, Mayo ha destacado los beneficios de la telemedicina: “facilita la comunicación médico-paciente. Por lo tanto, el paciente tiene un papel más activo en su tratamiento y permite una mejora de la integración asistencial entre los diferentes estamentos del SNS”. Todo ello resulta clave en el abordaje de los pacientes con dolor crónico.