La
Fundación de Investigación HM Hospitales, con el aval de la
Sociedad Madrileña de Obstetricia y Ginecología, ha organizado el congreso ‘
Obesidad en la Mujer. En busca de soluciones’, un evento monográfico que ha analizado el
impacto de esta problemática en la salud de la población femenina, y las implicaciones que tiene en campos como la
fertilidad, la
sexualidad, la
Ginecología, la
Oncología, la
Pediatría, la
adolescencia o la
Salud Mental.
Obesidad y cáncer ginecológico
Una de las interesantes charlas ha sido impartida por el Dr. Plúvio Coronado Martín, del Hospital Clínico San Carlos de Madrid. El especialista ha recalcado que “la enfermedad del s. XXI es la obesidad”. Y hay que tener en cuenta que “la obesidad aumenta el riesgo de padecer un cáncer”. Concretamente, ha especificado que “la
obesidad como causa/relacionada del 40 % de los cánceres”. En cuanto a los cánceres ginecológicos, ha especificado que los “más asociados a la obesidad son el de mama luminal y el de endometrio endometrioide”.
Algo que hay que tener en cuenta desde pequeños y es que, como ha matizado, “
la obesidad infantil aumenta el riesgo de cáncer en el adulto”. En este sentido, ha mencionado que “se evitarían más de 90.000 muertes al año por cáncer si la población mantuviera siempre un IMC menor a 25. En este sentido, ha recordado que la obesidad “es una patología que produce disbiosis (desequilibro en la microflora intestinal)”. Y, precisamente, las “alteraciones en la microbiota intestinal propician un ambiente favorable para la enfermedad”.
En conclusión, “
reducir la obesidad aumenta la supervivencia de las mujeres con cáncer, pero no está claro en los cánceres ginecológicos”.
Soluciones y recomendaciones
La Dra. Susana Monereo, del Hospital Ruber Internacional de Madrid, ha tratado, durante la jornada,
las soluciones y recomendaciones efectivas para la mujer con obesidad.
La endocrinóloga ha indicado también que la obesidad es uno de los mayores problemas de salud a los que se enfrenta la mujer fértil, al ser “una enfermedad crónica-multifactorial”.
Como ha comentado, una de las claves está en el
balance energético, es decir, la ingesta (hambre, saciedad, emoción, ansiedad, etc.) y el gasto (energético en reposo, actividad física, ejercicio, temperatura o tipo de alimentos). Así, ha incidido, es importante la adaptación metabólica, es decir, mecanismos de adaptación de resistencia a perder peso. Cambios en niveles hormonales o metabolismo.
Para reducir la obesidad, ha planteado diferentes soluciones: desde
acudir al psicólogo, a realizar diferentes actividades, pasando por un plan adaptado nutricional, ejercicio según las limitaciones o circunstancias de cada paciente u opciones farmacológicas para el manejo del peso, etc. En este sentido, ¿qué necesita una dieta para favorecer la pérdida de peso? Adherencia, balance negativo de calorías, una calidad en los alimentos, así como el ayuno intermitente, ha indicado.
Además, ha insistido en lo importante que es moverse en la vida cotidiana, reduciendo el ocio pasivo y fomentando el activo, usar menos el coche, subir las escaleras andando… El apoyo psicológico también es fundamental, sobre todo para luchar contra el estigma.
Por otro lado, ha informado, “los agonistas del receptor del GLP-1 tienen efectos multifactoriales”.
En cuanto a los nuevos fármacos, “hay opciones muy interesantes” y ha mencionado, entre otros, la semaglutida, “que ha demostrado una importante pérdida de peso en pacientes en distintas circunstancias que pueden llegar al 25 %, con una inyección subcutánea semanal”. No obstante, ha insistido que independientemente del que sea, “personalizar y mantener el tratamiento a lo largo del tiempo es importante”.
Cirugía de la obesidad: Indicaciones, riesgos y resultados
Otra de las interesantes charlas ha sido impartida por el Dr. Andrés Sánchez - Pernaute, del Hospital Universitario HM Puerta del Sur de Madrid, sobre
Cirugía de la obesidad. Indicaciones, riesgos, resultados. El especialista ha indicado que “la cirugía bariátrica y metabólica ha tenido un incremento exponencial gracias a los avances técnicos”.
Así, ha recordado que hace años las complicaciones postoperatorias y la mortalidad eran importantes. En 1990 con la laparoscopia hay un cambio destacado y a raíz de ahí ha habido nuevos avances y técnicas mejorando los efectos en general. En los últimos 6 meses las dos sociedades más importantes del sector se reúnen y se ha reconocido la obesidad como una enfermedad crónica.
En este sentido, la cirugía, ha mencionado, es un tratamiento efectivo y duradero de la obesidad y las comorbilidades, con una pérdida de peso superior a los tratamientos no quirúrgicos, con una significativa mejoría del estado metabólico y una mortalidad perioperatoria del 0,03-0,2 %.
No obstante, como ha informado, para los mayores de 65 años antes era un riesgo, pero ahora, “más que la edad biológica, hay que tener en cuenta otros factores como la capacidad cognitiva, fragilidad, tabaquismo, deterioro de otros órganos o las comorbilidades”. Las hernias son otro punto a tener en cuenta, así como los trasplantes.
Así, propone “
seguir estrategias para mejorar los datos: prevención de la obesidad infantil, incrementar la eficiencia del sistema público, encontrar alianzas con el privado, hacer partícipes del problema a la Administración y a las aseguradoras, y abaratar los costes”.
