Otsuka ha presentado su proyecto
Dreamland. Este se enmarca en su estrategia de Responsabilidad Social Corporativa, para mejorar sus resultados individuales y, por ende, los de la empresa, a través de un aspecto fundamental para el rendimiento laboral como es el descanso. Las personas de Otsuka Pharmaceutical España que han participado en el
proyecto Dreamland han aumentado una media de 7,4 por ciento su descanso diario en tan solo 6 meses.
El proyecto se ha desarrollado durante ocho meses, desde mayo hasta diciembre de 2022, en formato concurso. En él han participado un total de 60 personas de la plantilla de Otsuka en nuestro país. Para ello, la compañía regaló a cada participante una pulsera Fitbit Charge 5, con el objetivo de medir su sueño, tanto en tiempo como en parámetros de calidad.
En la primera fase del proyecto
Dreamland los datos revelaron que
quienes han participado dormían de media 6,4 horas. Posteriormente, durante seis meses, la compañía les ha alentado a mejorar su sueño a través de diferentes acciones de formación, comunicación y recomendaciones para tener un buen descanso. En ese período personas participantes mejoraron sus resultados hasta llegar a una media de 6,9 horas al día. Todas aquellas personas que han mejorado su descanso en un mínimo del 15 por ciento serán recompensadas con un día extra de vacaciones en 2023.
El descanso de los españoles
En esta iniciativa, Otsuka también ha querido poner en valor la
estrecha relación que existe entre el sueño y la salud mental, una de las áreas terapéuticas clave de la compañía. En este sentido, Diego García-Borreguero, director de la clínica Instituto del Sueño, ha explicado que “la
población adulta, de media, duerme un 20 por ciento menos de lo que le correspondería”. Esto repercute en su salud mental, ya que, como afirma el doctor, “las personas con
insomnio tienen un riesgo tres veces superior de padecer de depresión clínica y un riesgo al menos 1,5 veces superior de padecer trastornos de ansiedad si se compara con la población sin insomnio”.
Este mal descanso también afecta a la salud general, puesto que algunas de las consecuencias médicas que produce la falta de sueño crónica son la obesidad, la diabetes tipo 2, un incremento del riesgo cardiovascular, alteraciones inmunológicas con mayor predisposición a infecciones especialmente respiratorias, y, según algunos estudios, incluso tumores. García-Borreguero añade que también “se ha observado un incremento de la mortalidad de hasta el 12 por ciento en las personas que duermen menos de cinco horas al día”.