La Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (
SEGO) ha publicado un consenso sobre la
evidencia científica acumulada de la anticoncepción basada en solo gestágenos, es decir, sin estrógenos. Se trata de una opción mucho menos utilizada que la anticoncepción hormonal combinada (estrógenos más gestágenos). Habitualmente, se ha relacionado como método anticonceptivo durante la lactancia. Sin embargo,
según este nuevo documento, podría ser una opción para cualquier circunstancia, “con una alta eficacia y seguridad”.
Según el documento, la anticoncepción basada en solo en gestágenos sería especialmente recomendable en algunas situaciones. En concreto, en las que el uso de los anticonceptivos hormonales combinados (AHC) supone más riesgo que beneficios. También en las que el riesgo resulta inaceptable. Sin embargo, la guía subraya que estos métodos
no son exclusivos para aquellas mujeres que no cumplen criterios de elegibilidad para la AHC. Así, insiste en que constituyen una opción para todas las mujeres.
No obstante, los autores del consenso indicen en que “es importante considerar que la eficacia y la efectividad de las píldoras de solo gestágeno es la misma que la del método más utilizado, que es la anticoncepción hormonal combinada”. Por ello, califica a estos anticonceptivos orales como “una excelente alternativa en situaciones de limitación de atención médica”.
Como ejemplo pone la reciente epidemia por COVID-19. En estos casos podría ser una primera elección en consulta telefónica o después de un parto o un tratamiento puente en caso de tener que prolongar los métodos anticonceptivos de larga duración.
Uso de la anticoncepción basada solo en gestágenos
Actualmente la utilización en España de estos métodos es muy baja, incide el consenso. De acuerdo a la encuesta realizada en 2020 por la Sociedad Española de Contraconcepción, el uso de los métodos anticonceptivos basados en solo gestágeno
oscila entre el 4 por ciento del DIU y el 0,4 por ciento del inyectable, siendo el del implante de un 1,4 por ciento y el de la píldora de solo un 0,7 por ciento.
Cabe recordar que existen
cuatro vías de administración para la anticoncepción basada solo e gestágenos. La más común, la oral, consistente en comprimidos de desogestrel y drospirenona que son una alternativa a la píldora tradicional, con un efecto anticonceptivo de corta duración. La seguiría la intramuscular, consistente en inyectables de acetato de medroxiprogesterona en depósito con un efecto de duración media.
En el caso de la subcutánea, consistiría en un implante de etonorgestrel, con forma de varilla de 2 mm de diámetro y 4 cm de longitud que se coloca en la parte superior interna del brazo a nivel subdérmico, de larga duración. Por último, estaría la vía intrauterina, consistente en un dispositivo intrauterino (DIU) de levonorgestrel, también de larga duración.
