Las tecnologías relacionadas con la telemedicina han demostrado ser beneficiosas en un amplio abanico de actuaciones médicas, como exámenes, diagnósticos, gestión, tratamiento y seguimiento a largo plazo de pacientes con enfermedades crónicas, pero aún existen muchas barreras para su normalización en Europa, según un nuevo…
Las tecnologías relacionadas con la telemedicina han demostrado ser beneficiosas en un amplio abanico de actuaciones médicas, como exámenes, diagnósticos, gestión, tratamiento y seguimiento a largo plazo de pacientes con enfermedades crónicas, pero aún existen muchas barreras para su normalización en Europa, según un nuevo estudio impulsado por la Región Europea de la Organización Mundial de la Salud (OMS)
La investigación, publicada en la revista científica ' Journal of Medical Internet Resarch', hace un resumen de varias revisiones sistemáticas sobre el uso de la telemedicina en 53 países.
Su principal autor es Francesc Saigí, investigador de los Estudios de Ciencias de la Salud de la UOC y del grupo de investigación Epi4Health y director del centro colaborador de la Organización Mundial de la Salud en salud digital, vinculado a los Estudios de Ciencias de la Salud de la UOC y con el apoyo del eHealth Center (eHC). Por parte de la UOC, también han participado en el estudio la investigadora del eHC Noemí Robles y las estudiantes de doctorado Keti Ivanovska y Che Riva.
Aunque el uso de la telemedicina permite ofrecer servicios de salud de calidad de forma accesible y coste-efectiva y es útil para reducir la morbilidad y la mortalidad, no fue hasta la pandemia de la COVID-19 que esta práctica se extendió, sobre todo para seguir proporcionando servicios de salud a los pacientes.
Con el objetivo de tener una visión general del estado de la telemedicina en la región europea de la OMS (que comprende a los países europeos y algunos países de Asia Central), los autores de la investigación analizaron datos de más de 2.000 estudios sobre telemedicina, que contaron con la participación de más de 20.000 pacientes dentro de la región europea de la OMS.
'Hemos descubierto que el uso de herramientas digitales en la prestación de servicios de salud tiene un impacto claro y significativo en los pacientes. Observamos mejores resultados clínicos, mejor seguimiento por parte de los profesionales de salud y un beneficio general, tanto para los pacientes como para los profesionales', ha explicado David Novillo Ortiz, asesor regional de la OMS en salud digital y datos, y también autor del estudio.