Aunque hoy en día el 8 de marzo aglutina todas las reivindicaciones de derechos para las mujeres, es conveniente recordar el origen de este Día de la Mujer, una jornada de reclamación laboral. Una exigencia que sigue tan vigente porque en un contexto de desigualdades, la del trabajo en precario, las diferencias salariales y las dificultades para ocupar puestos de responsabilidad, siguen estando muy presentes para las mujeres. También en Sanidad.
Tal y como señala Ángela Hernández Puente, vicesecretaria general AMYTS (Sindicato Médico de Madrid), se sigue trabajando por alcanzar una igualdad efectiva en la profesión; porque aunque en principio y sobre el papel en el sector público las leyes son neutras y no hay una discriminación para la mujer, “de facto se producen injustas e intolerantes situaciones de desigualdad”.
Hernández Puente cita como ejemplos el prorrateo de guardias durante el embarazo y la lactancia. “En algunas comunidades se ha conseguido que se pague dicho prorrateo. Sin embargo, a la hora de la verdad no se está eximiendo a las profesionales, con lo cual ni exención, ni prorrateo ni protección de la lactancia”, explica.
La vicesecretaria general de AMYTS se lamenta también de que continúe existiendo el techo de cristal, “a pesar de que en las facultades somos el 74 por ciento de las estudiantes de Medicina, conforme vamos escalando en puestos de autoridad en Sanidad, este porcentaje va disminuyendo respecto a la proporción de hombres. No solo pasa en los cargos de la administración sanitaria, también ocurre en los cargos de sindicatos y de sociedades científicas”, añade, mientras reconoce, con satisfacción, que la reciente renovación de la central médica de Madrid ha conseguido posicionar a más mujeres en la dirección. “No se trata de una cuestión de cuotas, solo pedimos que no se pongan trabas”, aclara.
Sin posibilidad de conciliar
Hernández Puente se refiere a la conciliación que afecta tanto a hombres como mujeres. “En los turnos de tarde en atención primaria (AP) en algunas comunidades la dificulta muchísimo, porque no es una cuestión de género ya que la familia es una cosa de dos, de hombres y mujeres. A pesar de ello, hasta ahora nadie ha revisado el tema de las guardias de 24 horas y lo que suponen para la conciliación familiar de los médicos”.
Desde la central AMYTS seguirán reivindicando que se exima de guardias a las médicas durante la lactancia, una demanda asumida en diciembre de 2016, pero que no se está concediendo, aunque la OMS haya dado una serie de recomendaciones 'que luego no se permite a las sanitarias cumplir”, insiste.
La curva ascendente de presencia femenina parece imparable, mientras que en 1985 en España las mujeres eran un 25 por ciento del conjunto de los médicos, esta cifra estaba en el 49,77 por ciento a finales del 2016, aunque con notables diferencias entre las distintas comunidades autónomas; de forma que en alguna su presencia llegaba hasta el 70 por ciento. Esta tendencia se encuentra en consonancia con la mayoritaria presencia femenina en las facultades de Medicina, que supera el 70 por ciento, y con el mismo porcentaje de mujeres que consiguen plaza MIR.
Para Hernández Puente, la feminización de la Sanidad es una realidad a la que habrá que responder, “no hay que criticarla, sino todo lo contrario. Habrá que poner en marcha medidas efectivas de conciliación”, añade, al tiempo que indica que en estos momentos el 60 por ciento del personal del SNS son mujeres. “Es una curva muy bonita porque si se cruzan las de mayores y menores de 50 años se ve que por encima de 50 años hay mayor porcentaje de hombres, y por debajo más de mujeres, hasta el extremo que en las facultades de Medicina se dan cifras del 74 por ciento de mujeres”, subraya.
Infranotificación de casos de acoso
¿Hay especialidades reservadas a hombres? “El acceso es el mismo para hombres y mujeres, pero la realidad es otra. Y es que aunque la conciliación es cosa de dos, las reducciones de jornada en Sanidad las piden más las mujeres; las médicas seguimos renunciando en mucha mayor medida que los hombres a nuestro desarrollo profesional por cuidar a la familia. Eso se traslada también a especialidades, como las quirúrgicas que tienen guardias de 24 horas y se produce un sesgo de selección que mejoraría si las condiciones fuera más beneficiosas”, explica la vicesecretaria de AMYTS, central que se sumará a manifestación de esta tarde que saldrá desde Atocha.
Hernández Puente no desea que quede en el olvido ni pasar de tapadillo sobre un tema espinoso que se sigue produciendo, tanto en la Sanidad pública como en la privada, como es el acoso sexual en el trabajo. Algo que se registra en todo el mundo. “ Tiene que haber tolerancia cero ante estas actitudes”, indica, al tiempo que anima a las profesionales sanitarias del SNS a denunciarlo, al igual que las agresiones. “En el sindicato tenemos una abogada penalista que se encarga del tema directamente. Con situaciones de acoso hay que tener tolerancia cero. Creemos que hay una infranotificación, y esto no puede ser”, concluye.
8-M: Las situaciones de desigualdad, también entre el personal médico
Ángela Hernández, vicesecretaria general de AMYTS, anima a las facultativas a denunciar "todas las agresiones y situaciones de acoso que padezcan en Sanidad”
Nekane Lauzirika
8 de marzo 2019. 9:55 am