La Asociación de Juristas de la Salud, sociedades científicas de SESPAS, profesionales del Derecho vinculados a la Sanidad y representantes de la industria farmacéutica se han reunido en el Hospital Carlos III de Madrid en su II Jornada Multidisciplinar, auspiciada por la Escuela Nacional de Sanidad…
La Asociación de Juristas de la Salud, sociedades científicas de SESPAS, profesionales del Derecho vinculados a la Sanidad y representantes de la industria farmacéutica se han reunido en el Hospital Carlos III de Madrid en su II Jornada Multidisciplinar, auspiciada por la Escuela Nacional de Sanidad y como objetivo el intercambio de experiencias entre los distintos profesionales para mejorar el gobierno de la Sanidad pública.
Tal como recordó el presidente de SESPAS, Ildefonso Hernández, 'cada vez está más claro que uno de los pilares de la Salud Pública es la parte jurídica. No se trata de una cuestión de marco o periférica sino central. Las leyes son un buen sistema de control', añadió. En este sentido, Cristobal Belda Iniesta, director de la Escuela Nacional de Sanidad, afirmó que la implicación de todos los sectores permiten 'que podamos llevar a cabo nuestra trabajo y que valiéndonos de nuestra función de servicio público seamos capaces de que las cosas ocurran'.
Visión global
'Estas jornadas están destinadas a contribuir a restaurar un debate y reflexión en grupo para obtener una visión global de un mismo tema', señaló la presidenta de la Asociación de Juristas de la Salud, Josefa Cantero Martínez. En esta ocasión, el objetivo de debate giró en torno a la política farmacéutica. Para ello, los expertos abordaron cuatro aspectos fundamentales que se encuentran en el debate público a lo largo de cuatro mesas redondas.
La primera trató el tema de los ensayos clínicos con medicamentos de ensayo humano con especial referencia a las enfermedades olvidadas y raras. Por su parte, la segunda mesa de debate abordó las políticas de gestión de la salud pública tomando como ejemplo el caso del Ébola. En particular, la priorización del gasto, infraestructuras, cómo gestionar una situación de emergencia internacional o qué organización requiere la tutela de la Salud Pública.
En este sentido, Cristobal Belda reconoció que 'no se había sabido dar como país una respuesta coordinada ante una alarma de Salud Pública y se ha tenido que hacer tras el primer caso de contagio con un patógeno que no estaba en nuestro medio en un ciudadano europeo'. Belda añadió que esa situación permitió a España volver a estar en el foco internacional y sacó a la luz el trabajo sordo que se había llevado a cabo durante mucho tiempo, como la vinculación entre las distintas disciplinas y la Salud Pública sin cuya coordinación la Escuela no habría podido enfrentarse a esa situación.
Toma de decisiones de la Administración
La tercera mesa, titulada 'Conflictos entre la Salud Pública y la libertad de empresas', estuvo centrada en debatir el uso de las vacunas, tomando como ejemplo la de la varicela. 'Se trata de cuestiones enormemente delicadas debido a los intereses y objetivos que están en juego y corresponde a la Administración intentar coordinarlos y actuar con una máxima transparencia', apuntó.