Los especialistas alertan sobre la falta de reumatólogos

En la actualidad, más de 11 millones de personas sufren enfermedades reumáticas en España y su prevalencia aumentará por el devenir demográfico. A pesar de esta realidad, hay un problema de falta de reumatólogos en nuestro país, que hace que se produzcan situaciones de inequidad en los accesos a servicios sanitarios. Además, la falta de reumatólogos se agravará en los próximos años. Por una parte, debido a las jubilaciones de la generación baby-boom. Por otra, por una mayor demanda que precisará de un incremento de profesionales. Es por ello que desde la Sociedad Española de Reumatología exponen que en los próximos 15 años debería aumentar alrededor de un 40 por ciento la oferta de especialistas en Reumatología para hacer frente a las crecientes necesidades y al recambio generacional. A su vez, resulta fundamental reforzar Atención Primaria, para crear vías de derivación precoces, ya que las enfermedades reumáticas son la segunda causa de consulta en Atención Primaria, por detrás de las afecciones respiratorias.

Falta de reumatólogos y calidad asistencial

Así se ha puesto de manifiesto en ‘Reunión SER de Planificación Estratégica en Reumatología para jefaturas de Servicio/Sección/Unidad’, que se ha celebrado los días 10 y 11 de febrero. En el mismo se concretó que, según el estudio “Realidad de la Reumatología en España y sus Comunidades Autónomas antes de la pandemia”, la tasa de especialistas en Reumatología por 100.000 habitantes en España es de 2,1711, muy inferior a la recomendada por la OMS. La falta de reumatólogos supondrá sin duda un reto en la calidad asistencial a estos pacientes. Susana Romero, vicepresidenta de la SER, incidía en que una adecuación correcta permitirá garantizar una asistencia de calidad y la seguridad del paciente. “De esta manera se podrá favorecer la detección precoz de las enfermedades musculoesqueléticas y autoinmunes sistémicas para disminuir el daño, evitar la incapacidad y mejorar notablemente la calidad de vida de estos pacientes. Todo ello,  disminuyendo la repercusión en su entorno familiar, laboral y social y en el Sistema Nacional de Salud”, concluía.