Los médicos insisten en que no se puede trabajar con miedo en su consulta

“El médico no puede ir a trabajar con miedo a la consulta' esta es la idea que Serafín Romero, presidente de la Organización Médica Colegial (OMC) ha querido defender en el marco del II Congreso Andaluz de Derecho Sanitario, que en esta edición se ha centrado especialmente en la lacra social de las agresiones a médicos, a través de una de sus mesas redondas. Durante la misma, Romero informó de que solo en 2017 se comunicaron 515 agresiones a los Colegios de Médicos, mientras que desde la creación del Observatorio de las Agresiones en 2010 se han recogido un total de 3.429 agresiones a médicos en consultas. En este sentido, el presidente de la OMC explicó cómo ha evolucionado el papel de los Colegios de Médicos ante este problema desde los inicios, tomando como referencia la constitución de una mesa contra las agresiones al personal sanitario en 2004 en el Colegio de Médicos de Córdoba y que reunió a los principales agentes involucrados, (administraciones autonómicas, Colegios sanitarios, ejercicio privado, consumidores y sindicatos. Lucha que se acentuó a partir de 2009 tras el asesinato de la Mª Eugenia Moreno, en la consulta de un centro de salud de Moratalla (Murcia). Desde entonces, Sanidad, Justicia e Interior han sido las tres bases de actuación en el terreno de las agresiones en la consulta médica, según recordó el presidente de la OMC. Respecto a Sanidad, Romero lamentó que el Plan Nacional contra las agresiones esté paralizado. En el ámbito de la Justicia se ha logrado, según indicó, que los profesionales fueran reconocidos como autoridad “aunque sólo en el ámbito público”, de ahí su insistencia en que este reconocimiento también se extienda al ámbito privado. Sacrificios de los profesionales Durante este II Congreso, también intervino en otra de las mesas el exministro de Sanidad Julián García Vargas quien afirmó que “la Sanidad ha hecho muchos sacrificios que siempre han hecho los profesionales y los gerentes, nunca han venido desde arriba”. Es por ello que el exministro exponía un listado de cinco medidas para una reforma del Sistema Nacional de Salud. La primera de ellas debe pasar, según explicó, por consolidar las microreformas y “sacrificios” de gerentes y profesionales: hacer más con menos dinero; su segunda propuesta es la estimulación a los profesionales que implica una mejora retributiva y una ampliación del rango de categorías profesionales aprovechando la sentencia del Tribunal de Luxemburgo sobre el exceso de interinos; en tercer lugar, entiende que debería existir un Consejo Interterritorial más operativo y que se acerque a una organización federal; por último, Vargas insistía en la idea de  “acabar con el principio de todo para todos, gratis y en todos los lugares”  y en la necesidad de una vinculación de un Pacto por la Sanidad y una Estrategia Nacional de Salud que implique a profesionales y a políticos. Por último, el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), Lorenzo del Río, agradeció el trabajo de aquellos que “han propiciado este marco de coincidencia entre dos profesiones como el derecho y la Sanidad”. Igualmente, Del Río apuntó que “lo que antes eran simplemente debates morales, hoy se han convertido en debates jurídicos”.