El Centro Mexicano de Salud Visual Preventiva y La Sociedad Mexicana Oftalmología presentaron un documento dirigido a su comunidad médica en el que se emiten recomendaciones para disminuir la tasa de contagio basado en las recomendaciones científicas internacionales que han considerado a los médicos oftalmólogos…
El Centro Mexicano de Salud Visual Preventiva y La Sociedad Mexicana Oftalmología presentaron un documento dirigido a su comunidad médica en el que se emiten recomendaciones para disminuir la tasa de contagio basado en las recomendaciones científicas internacionales que han considerado a los médicos oftalmólogos como población vulnerable. Es por eso que en el Día de la Salud Visual, compartimos este conocimiento en busca de una mejor atención.
La relación oftalmológica con COVID-19 a través de las lágrimas de los pacientes y además se ha descrito un cuadro de conjuntivitis específica, lo que aumenta el riesgo de contagio por la cercanía que requiere la labor del especialista. Se han descrito las siguientes recomendaciones para el manejo oftalmológico.
• Realizar categorización (triage) de pacientes previo al ingreso a la sala de espera.
• Lavado de manos de médico y paciente, previo a iniciar interrogatorio y la exploración.
• Distancia de 2 metros entre médico y paciente durante el interrogatorio,
• Uso de escudo facial en lámpara de hendidura.
• Mascarilla quirúrgica tanto en médico como en paciente.
• Lavado de manos con jabón quirúrgico o uso de gel antibacterial - 70% alcohol-, de médico y paciente al terminar la consulta.
• En sala de espera evitar aglomeraciones, establecer distancia de al menos un metro y medio cuando los pacientes estén sentados.
• Espaciar las citas, con el objeto de mantener una revisión fluida y cumplir las medidas de limpieza de asepsia antes y después de cada revisión.
• Utilizar solo un cubículo para la exploración.
• En caso de pacientes sospechosos, se recomienda uso de mascarilla quirúrgica de 3 capas por parte del paciente y mascarilla N95 por parte del médico, guantes de látex para la exploración, bata y gorro quirúrgico y desinfección del consultorio.
• En casos confirmados, ya sea con sintomatología leve o grave, se debe valorar la relevancia de la atención oftalmológica, si el paciente no presenta una condición urgente o grave podría ser evaluado posteriormente.
• Algunas sociedades internacionales de Oftalmología han sugerido limitar la atención de pacientes no urgentes.
En el documento también son indicadas las medidas de limpieza y desinfección desde pisos y paredes y superficies con solución de hipoclorito de sodio al 0.21% para limpieza del tonómetro, solución de NK-cide de 20 ml en 1 litro de agua para remojar instrumental quirúrgico y solución de amonio cuaternario para superficies de trabajo (remojar y dejar secar por 4 minutos).
Las recomendaciones recogidas en este documento deberán ser adaptadas de acuerdo con las circunstancias particulares de cada equipo de profesionales de la salud. Dichas recomendaciones variarán a medida que se genere mayor evidencia respecto al impacto de la enfermedad en la atención oftalmológica de los pacientes. Por tal motivo, el presente documento se actualizará de manera continua conforme emerjan nuevas recomendaciones, con el sustento científico suficiente para modificar nuestra conducta de atención.
La erradicación completa de la transmisión no se vislumbra en un horizonte cercano y debido a la situación actual de emergencia, la Sociedad Mexicana de Oftalmología y el Centro Mexicano de Salud Visual Preventiva invitan a la comunidad oftalmológica de México a llevar a cabo todas las acciones necesarias para afrontar, de manera eficiente, la crisis sanitaria que se vive actualmente en nuestro país, disminuyendo los riesgos para nuestros pacientes, familiares, colaboradores de trabajo y para nosotros mismos; mientras continuamos velando por la salud visual de nuestra población.