En el marco el Día Mundial sin Tabaco, que se celebra este 31 de mayo, AEPap hace un llamamiento para aumentar la percepción de riesgo del vapeo en jóvenes. De acuerdo con la última Encuesta ESTUDES de 2023, elaborada por el Plan Nacional sobre Drogas del Ministerio de Sanidad y presentada hace unos meses, más de la
mitad de los escolares de 14 a 18 años -el 54,6 por ciento- ha consumido alguna vez cigarrillos electrónicos. La cifra se ha incrementado más de 10 puntos porcentuales desde 2021 y es la mayor registrada en la serie histórica. Al mismo tiempo, la encuesta subraya que “el riesgo percibido” del uso esporádico de cigarrillos electrónicos es el más bajo de todas las sustancias analizadas (alcohol, cannabis, cocaína, etc.), con un 38,8 por ciento de encuestados que señalan que es peligroso.
El vapeo en jóvenes es por tanto una de las preocupaciones de los pediatras de Atención Primaria. Carmen Fidalgo, secretaria de la
AEPap apunta que “no solamente hay vapeadores con forma de personajes conocidos de cómic o de dibujos animados, es que algunos están
hechos de tal manera que se confunden con material escolar. Tienen forma de subrayadores, sacapuntas… no hace falta ser muy perspicaz para pensar que esto está hecho para atraer a los menores, desde edades tempranas, y también para que se camuflen a la vista de los educadores”.
Falsos mitos del vapeo en jóvenes
Pese a la evidencia científica sobre las consecuencias nocivas para la salud, los pediatras, enfermeros, educadores y familias se encuentran con obstáculos para frenar el vapeo en jóvenes. Entre otros, la
venta incontrolada, no sólo en grandes superficies o perfumerías, sino a través de internet. También que haya influencers que recomienden en redes sociales este tipo de dispositivos.
Asimismo, otro de los problemas es la baja percepción de riesgo, Fidalgo explica que, en las charlas en colegios, algunos alumnos manifiestan que “su padre, su madre o algún familiar se ha desenganchado del tabaco por el uso de vapeadores, y p
iensan que son inocuos y no perjudiciales para la salud”. Frente a esta percepción, los pediatras explican sus compuestos tóxicos y las enfermedades con las que se puede relacionar, como cáncer, afecciones cardiovasculares, irritación de las vías respiratorias “y una enfermedad que ya está descrita como la enfermedad del vapeo y se llama EVALI”, concluye la experta.