Los pediatras piden recordar a embarazadas la importancia de la vacunación contra la tosferina

En España la vacunación contra la tosferina incluye cuatro dosis (a los dos y cuatro meses y refuerzos a los 11 meses y seis años de edad) y confiere protección en los primeros años de vida frente a la tosferina grave. Sin embargo, el efecto protector de las vacunas va disminuyendo con el tiempo. No obstante, desde el segundo semestre de 2023 y, sobre todo, en los tres primeros meses de 2024 se ha registrado un aumento extraordinario del número de casos de tosferina en España. También otros países europeos están sufriendo una situación similar. Es por ello que desde la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap) hace también un llamamiento a los profesionales implicados en la salud infantil y de las mujeres gestantes a informar sobre los beneficios de la vacunación. Y es que, si bien las coberturas vacunales en España frente a la tosferina son elevadas para la vacunación infantil (mayor del 95 por ciento en las tres dosis durante el primer año), en el caso de la vacunación durante el embarazo, es inferior (87,2 por ciento en 2022) y por tanto no se alcanza el objetivo de cobertura deseable. Cabe recordar que la vacunación contra la tosferina debe recibirse entre las 27 y 36 semanas de gestación (preferiblemente en las semanas 27 o 28).

Llamamiento a la vacunación contra la tosferina

Asimismo, es necesario insistir a las administraciones sanitarias a facilitar a estos profesionales la información necesaria para que puedan ofrecer la vacunación a los niños y embarazadas no vacunados. Adicionalmente, como recomienda el CAV de la AEP en su calendario, la tosferina debe incluirse en los calendarios de vacunación del adolescente (a los 12 a 14 años). En este sentido, AEPap apoya el comunicado del Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría (AEP) y hace un llamamiento a las familias a revisar y completar los calendarios de vacunación de los niños y adolescentes. Con los programas de vacunación mencionados y las vacunas disponibles, la tosferina no se podrá eliminar, pero sí reducir su frecuencia y gravedad y, sobre todo, evitar los casos de tosferina grave en los primeros meses de vida.