La VIII Jornada del Grupo de Trabajo de Bioética y Profesionalismo de la
Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI), ha tenido lugar bajo el lema “Ética de la comunicación en la relación médico-paciente”. Durante la misma, entre otras cuestiones, se puso de manifiesto que los principales conflictos éticos a los que se enfrentan los internistas son los relacionados con el final de la vida. Asimismo, se puso de manifiesto la importancia de
fomentar una adecuada comunicación desde el punto de vista ético y clínico en la relación médico-paciente.
En relación a los conflictos en la comunicación médico-paciente, en los internistas españoles se ha demostrado que son menos frecuentes e importantes que entre los internistas de otros países, como los de México, pese a “compartir lengua y raíces.
En este sentido, se ha reflexionado sobre “cómo acompañar al paciente para construir una comunidad mejor en el ámbito sanitario”, se ha incidido en la necesidad de impulsar y fomentar una “buena comunicación con el paciente”, con el foco puesto en el valor de la comunicación en la Medicina basada en la evidencia, y se ha disertado sobre cómo debe ser esa comunicación y sobre el rol que deben desempeñar las instituciones sanitarias en el campo de la humanización.
Conflictos éticos con el final de la vida
En un artículo publicado en RCE por miembros del grupo de trabajo de Bioética y Profesionalismo de SEMI, se ha puesto de manifiesto, precisamente, que “
el 70,1 por ciento de los internistas encuestados se enfrentaba a conflictos éticos en su práctica clínica con frecuencia o casi siempre”. Además, para “al menos el 39,9 por ciento de los profesionales, estos problemas éticos complicaban la asistencia clínica cotidiana con frecuencia o casi siempre”.
En cuanto a los
conflictos éticos relacionados con el final de la vida, la mayoría tienen que ver con la limitación del esfuerzo terapéutico, el tratamiento paliativo o las órdenes de no reanimación cardiopulmonar), los conflictos con familiares y la toma de decisiones en pacientes que no tienen competencia para decidir por sí mismos.
También durante la Reunión se abordó la “conspiración del silencio” en varias ocasiones. Destacaron la importancia de “validarnos moralmente en la comunicación, adaptarnos, identificar y hacer explícitos los temores, empatizar y confrontar”. La
formación “en cuidados paliativos y en bioética son pilares estratégicos” es importante tener en cuenta a “los familiares y cuidadores, porque son nuestro mayor aliado para lo mejor para nuestros pacientes”, concluyeron en este foro los expertos.