La doctora Karina Quiñones Reyes, médico cirujano con diplomado en Urgencias, comparte para El Médico Interactivo México cuáles podrían ser las consecuencias de salud que atrae la mala calidad del aire en zonas de contingencia ambiental en el Marco del Día Mundial del Medio Ambiente.
Sobre la mala calidad del aire
Comúnmente se habla de un grupo de elementos dispersos en el aire que respiramos, en el cual hay una concentración de arsénico, níquel, cadmio, plomo, mercurio, óxido de azufre, algunos otros componentes que contienen los aerosoles, hidrocarburos propios de gasolinas y autos y las sustancias del tabaco, entre otros. Cabe destacar que la contaminación no solo afecta al aire, sino también al agua.
Los contaminantes antes mencionados provocan afecciones a la salud, las más importantes son respiratorias, cardiovasculares, dérmicas y oftalmológicas.
¿A quién afecta con mayor frecuencia?
Según la OMS, cuando aumentan los contaminantes las poblaciones más susceptibles suelen ser los niños, adultos mayores, pacientes con enfermedades crónico degenerativas como diabetes e hipertensión debido a un mayor compromiso cardiaco y pulmonar.
En el caso específico de los niños, hay más riesgo de secuelas en el aprendizaje, incluso algunos investigadores han relacionado el autismo con algunos de estos contaminantes. También, hay estudios en los que se desvelan los estragos a nivel neurológico en personas con Parkinson o Alzheimer. En una exposición prolongada pueden llegar a padecer fatiga crónica.
Manifestación de síntomas y secuelas
Los estragos de la contaminación no se manifiestan de manera inmediata, sino a mediano y largo plazo, sin embargo, personas que padecen asma, rinitis alérgica o dermatitis atópica tienden a generar una reacción mayor y se manifiestan con escurrimiento nasal, enrojecimiento y comezón en los ojos por resequedad, urticaria y cambios en las secreciones flemáticas.
Las secuelas a largo plazo son aquellas derivadas en la piel, como puede ser en el peor de los casos, un melanoma, también las alteraciones respiratorias crónicas, como es el caso de la EPOC y un mayor riesgo de cáncer de pulmón.
Los efectos de la contaminación a nivel ambiental provocan una mayor concentración de calor, lo que a su vez puede provocar sequía y aumentar las enfermedades por vector como dengue, paludismo y malaria.
Peligro en pacientes con enfermedades crónicas
Las indicaciones que deben seguir los pacientes con enfermedades crónicas ya mencionadas son evitar la actividad al aire libre, pero si van a hacerlas, utilizar cubrebocas o mascarillas anticontaminación, no disminuir la hidratación. También se recomienda mantener los niveles periódicos de niveles de glucosa y presión arterial para detectar alguna necesidad de ajuste en los medicamentos.
Recomendaciones sanitarias
Es necesario atender las indicaciones sanitarias, ya que durante las contingencias ambientales aumenta el riesgo de padecer alguna complicación respiratoria o cardiovascular en un 25-33 por ciento. Los parámetros en IMECAS para determinar la concentración de óxido de nitrógeno y MP10 son aquellos materiales particulados menores a 208 micrometros.
De 0 a 50 puntos tenemos una calidad del aire sin riesgos para la salud, entre 50 y 100 puntos existe una calidad regular y de 101 a 150 ya se considera mala calidad del aire. En ese parámetro ya existen las diversas complicaciones o reacciones en los pacientes ya mencionados.
Mala calidad del aire aumenta complicaciones respiratorias y cardiovasculares
Es necesario atender las indicaciones sanitarias, ya que durante las contingencias ambientales aumenta el riesgo de padecer alguna complicación respiratoria o cardiovascular en un 25-33%

Rebeca Flores
5 de junio 2019. 1:30 pm