Actualmente el mercado de AINES de venta libre es amplio, esto quiere decir que las personas pueden adquirirlos sin ningún tipo de restricción ni prescripción médica y sin corroborar si son o no candidatos para administrar los, lo que puede tener repercusiones en algunas enfermedades que pueden complicarse hasta convertirse en un problema crónico.
En esta ocasión, la doctora Rocío Guillén Núñez, médico adscrito al servicio de la Clínica del Dolor del Instituto Nacional de Cancerología INCAN, comparte con El Médico Interactivo México su experiencia en el tratamiento y diagnóstico del dolor, pues de acuerdo con un estudio publicado en la Revista Mexicana de Anestesiología es un problema de salud pública en el 13 por ciento del total de consultas en adultos de 18 a 59 años fueron por dolor crónico.
¿Qué es el dolor crónico?
Se define como aquel proceso doloroso que puede tener múltiples causas con un largo proceso de duración y permanencia por tres meses o más en la vida de una persona y que causa una merma o disminuye la calidad de vida del paciente. Existen varias causas de dolor crónico y que se determinan analizando qué parte del cuerpo esta afectada y cuál es su origen, puede ser de tipo somático, es decir, son articulaciones, cadera, etcétera. También existe dolor crónico neuropático que son asociados a procesos infecciosos como una neuralgia.
¿Cuáles son sus características?
A partir de las características que los pacientes expresan nosotros como médicos determinamos el tiempo de evolución que tiene qué tipo de dolor es:
El dolor agudo, se caracteriza por ubicarse en alguna lesión que se encuentra a la vista o por una causa fácilmente reconocible, como un dolor de estómago que se puede diagnosticar como apendicitis, pues esa es la razón del dolor.
El modelo de dolor crónico no es tan característico ni tan preciso, tiene patrones que se pueden extender, es decir, el problema original puede estar en la rodilla y con el paso del tiempo puede expandirse a la pierna y posteriormente puede percibir dolor al tacto, en fin, esos casos son considerados como dolor crónico.
¿Cuáles son los tratamientos?
Para comenzar, no es lo mismo tratar un dolor agudo y un dolor crónico y agudo. En el caso del dolor agudo se trata la causa que origina el dolor, como en el caso de dolor abdominal provocado por apendicitis, por lo cual debe intervenir quirúrgicamente y aplicar antiinflamatorios, antisépticos antiespasmódicos y otras cosas que aminorarán el dolor en el paciente, igualmente con alguna fractura.
En el caso del dolor crónico nos podemos encontrar con que el dolor es la enfermedad, aunque se atiendan y se corrijan otras cosas, sigue doliendo, entonces tratar el dolor como la enfermedad se refiere a la utilización de neuromoduladores, opioides, inhibidores selectivos no esteroideos que también actúan con antiinflamatorios.
¿Cómo actúan los inhibidores selectivos?
Son tan sencillos como los que se utiliza en un dolor de cabeza, en un proceso postoperatorio, etcétera, cuya acción indicada es controlar la inflamación y mejora la respuesta a l dolor y pueden controlar la curva térmica, es decir, la fiebre. Su acción específica es controlar la sustancia llamada ciclooxigenasa y los de última generación tienen un impacto menor en los efectos secundarios estomacales y tienen un menor efecto en el funcionamiento del riñón en comparación de los antiinflamatorios comunes que podían llegar a provocar sangrado.
Otro de los beneficios de los inhibidores selectivos de COX-2 es que protegen la estructura cardiaca cuando se toman a largo plazo, es decir, tratamientos de más de 12 meses, algo que es muy importante en un país como México que tiene un alto índice de cardiopatías. La frase “no hay medicamentos malos, sino malas prescripciones” es verdad, es por eso que es necesario adecuar la medicación para cada caso, cada enfermedad y comorbilidad.
¿Hay contraindicaciones para estos inhibidores?
En pacientes con disfunción renal se debe ser muy cuidadoso y ajustar la dosis en casos leves o moderados, sin embargo, si la disfunción es severa, no se debieran prescribir AINES o COX porque maltrata directamente al riñón. Pacientes propensos, con antecedentes o un sangrado de tubo digestivo activo no se deben utilizar. También en personas con alergia a la sal ya que pueden presentar una reacción.
En su experiencia en el INCAN ¿Cuáles son las afecciones que trata de manera frecuente la Clínica del Dolor?
En su mayoría metástasis por ser afección en hueso, neuropatías en algunos casos en que la tumoración comprimen las estructuras nerviosas o como un efecto esperado de la quimioterapia para combatir la propia enfermedad, radioterapia y la etapa posterior a las intervenciones quirúrgicas en pro de la curación del cáncer.
Más de 10% de consultas en adultos se deben a dolor crónico
El dolor crónico se define como aquel proceso doloroso que puede tener múltiples causas con un largo proceso de duración y puede permanecer por meses, provocando una merma que disminuye la calidad de vida del paciente.
Rebeca Flores
7 de septiembre 2018. 1:30 pm