La EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica) es una de las patologías respiratorias más prevalentes de nuestro país, ya que afecta a algo más del 10 por ciento de la población de más de 40 años (más de dos millones de españoles) y los expertos estiman que se convertirá en la tercera causa de mortalidad en el mundo en el año 2020. En concreto, más de la mitad de las personas que padecen enfermedades respiratorias crónicas está sin diagnosticar.
Por este motivo, los médicos de familia reunidos en Córdoba, en las III Jornadas Nacionales de Respiratorio de SEMERGEN (Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria), han realizado una actualización de ésta y otras enfermedades respiratorias, que constituyen, según ha advertido el doctor José Antonio Quintano, coordinador del Grupo de Trabajo de Respiratorio de SEMERGEN y presidente del Comité Organizador, entre el 10 y el 20 por ciento de la carga asistencial de estos profesionales. Este experto ha destacado que han aparecido nuevos fármacos en el tratamiento de la EPOC de los que se va a hablar en estas Jornadas.
Por otro lado, el doctor Quintano ha advertido que más del 70 por ciento de los casos no está diagnosticado. 'Aunque suele manifestarse en torno a los 40 años, la enfermedad se desarrolla y llega a estadios más severos a partir de los 60 años'. 'Se trata de una enfermedad crónica que puede llegar a ser incluso invalidante', ha añadido.
El tabaco es la causa más importante. De hecho, 'la incorporación de la mujer al hábito tabáquico está provocando más diagnósticos de EPOC y de cáncer broncopulmonar entre las féminas, algo que hace pocos años no se veía', ha comentado el doctor Antonio Hidalgo, presidente del Comité Científico. La Ley Antitabaco ha hecho que disminuyan los fumadores, pero 'sus verdaderos efectos no se verán hasta dentro de unos años'.
Según la doctora Milagros González, los pacientes con EPOC presentan otras enfermedades asociadas en mayor proporción que la población general. 'Esto puede ser debido a que la EPOC' 'según afirma esta experta- 'cursa con un componente inflamatorio mantenido, y aunque no se conoce con exactitud, puede permitir el desarrollo de otras enfermedades que afecten al aparato cardiovascular (incluyendo la insuficiencia cardiaca y las neoplasias)'. La doctora González ha añadido que 'puede coincidir con una osteoporosis, e incluso con trastornos psiquiátricos como la depresión'.
'Alrededor del 60 por ciento de la patología respiratoria general se ve en las consultas de Atención Primaria', ha afirmado el doctor Quintano. Según datos de SEMERGEN, hasta el 20 por ciento de la carga asistencial del médico de Familia viene motivada por estas enfermedades, donde 'el infradiagnóstico constituye uno de los principales caballos de batalla', ha apuntado. Esto se debe fundamentalmente a que existe un déficit educacional de la población general y a la menor utilización de herramientas diagnósticas en los centros de salud, según ha informado. La espirometría es el método diagnóstico por excelencia, una prueba que sirve para medir la capacidad pulmonar y los flujos aéreos. 'Es sencilla y debería realizarse por norma a los fumadores mayores de 40 años, y a aquellos que presenten síntomas respiratorios', ha subrayado.
Por su parte, el doctor Hidalgo también ha destacado una patología respiratoria que es prácticamente desconocida para la población general: el síndrome de apnea del sueño (SAHS). Se estima que en España hay más de dos millones de personas con esta enfermedad, de las que el 70-80 por ciento está sin diagnosticar. 'Es más frecuente de lo que pudiera parecer y causa de numerosos accidentes de tráfico', ha explicado. El SAHS afecta al 9 por ciento de los hombres y al 4 por ciento de las mujeres.
Otra de las enfermedades más prevalentes que se ha abordado durante las jornadas es el asma. La prevalencia se sitúa en torno al 5 por ciento de la población general, aunque en niños la cifra aumenta hasta el 10. Según ha comentado el doctor Hidalgo, 'casi la mitad de los asmáticos está sin diagnosticar, lo que se debe principalmente a que las personas jóvenes apenas acuden al médico'. El principal factor de riesgo de esta patología es la alergia. 'A diferencia de la EPOC, los tratamientos actualmente disponibles pueden llegar a revertir el curso del trastorno en sí, aunque no llega a curarse por tratarse también de una enfermedad crónica', ha aseverado. 'Aquí la clave está en aplicar la medicación desde niño, siempre y cuando se le diagnostique a esa edad'. Al igual que ocurre con otras enfermedades, la sospecha debe partir del primer nivel asistencial.