“Muchas mujeres se quedan estancadas en el middle management”

El sector farma es un sector muy feminizado y pese a ello sigue teniendo como reto contar con más mujeres en los altos puestos de dirección. Para lograr concienciar en la idea de que el talento no tiene género y la diversidad enriquece, el proyecto Mujeres en Farma trabaja dando soporte a las mujeres que quieren promocionar en sus carreras dentro del sector y colaborando con las empresas que trabajan por romper la brecha de género en esta área.

¿Podría explicar las claves del proyecto Mujeres en Farma para quien no lo conozca?

Es un proyecto en el que llevamos más de dos años y medio trabajando. El objetivo es ayudar a mujeres del sector a crecer en sus carreras profesionales y a que no tengan miedo en esa aventura. Es una comunidad interactiva que involucra tanto a mujeres como a hombres y en donde trabajamos por dos objetivos muy claros. En primer lugar, por empoderar el talento femenino. Por otro, dar visibilidad al sector como una industria referente en equidad y en inclusión. Por ello todas nuestras acciones siempre se basan en cuatro pilares: inspirar, capacitar, conectar y transformar.

¿Qué cifras podrían ejemplificar el por qué es necesaria una iniciativa como esta?

La industria farmacéutica, sin duda, es un sector privilegiado y referente en temas de diversidad. Lo que ocurre es que seguimos teniendo mucho por hacer. Poniendo datos, el empleo femenino en la industria es más del 53 por ciento y hay 44,8 por ciento de mujeres, más del doble que la media de las empresas del IBEX 35, en comités de dirección. En cambio, el número de mujeres CEO es solo del 20,3 por ciento. La cuestión de fondo es que muchas mujeres se quedan estancadas en el middle management. De hecho, muchas de las mujeres dentro de los comités de dirección ocupan posiciones de soporte y no posiciones vinculadas directamente con el negocio, que son las que permitirían un más fácil acceso a posiciones de dirección general.

¿Cómo es la situación de España respecto a otros países del entorno?

En España la industria farmacéutica tiene unos datos muy potentes en cuanto al empleo femenino, y hasta donde conozco por informes de países de nuestro entorno la situación es bastante similar. Por ejemplo, en Francia es un 56,3 por ciento, Italia un 44 por ciento o en Inglaterra un 54,2 por ciento.

El sector farma realmente es un sector muy feminizado, ¿cuál es el momento en el que se produce la brecha y el motivo por el que apenas hay mujeres en puestos de liderazgo?

Como comentaba, muchas mujeres se quedan estancadas en el middle management, es decir, en los mandos intermedios de las empresas. En mi caso, en mi vida profesional soy headhunter, es decir, reclutadora de talento en MCR International, una consultora de recursos humanos, y en mi día a día puedo ver de cerca la trayectoria profesional de muchas mujeres. Así, es fácil observar que en la vida profesional de las mujeres deben superar muchos obstáculos. El primero es cómo empezar a gestionar equipos, que es la gran pregunta que te hacen muchas mujeres en confianza. Después llegan las dudas para lograr entrar en un comité de dirección, luego para asumir una dirección general e incluso para llegar a ser consejera. Esos son los múltiples cursos que hoy en día están en auge. Y es que al final las mujeres seguimos enfrentándonos en retos en dónde tenemos que luchar con nuestras propias autolimitaciones, a levantar más la mano, ser más proactivas en el desarrollo de nuestra carrera profesional, trabajar el networking. Todo esto es en lo que trabajamos en Mujeres en Farma, es nuestra razón de ser.

¿Qué consecuencias tiene esta falta de talento femenino en los puestos directivos?

Pues te lo contesto al revés. Lo que hay es muchos estudios que han demostrado que incluir a las mujeres en los equipos directivos conlleva muchos beneficios, con mejores resultados. Según un estudio de la Organización Mundial del Trabajo, tres de cada cuatro empresas del sector privado que incluyen a las mujeres en sus equipos directivos han incrementado sus beneficios entre el 5 y el 20 por ciento. Es una realidad. La diversidad enriquece y mejora los resultados. Este es el mensaje que debemos tener presente. Cuando las mujeres dirigen, no sé si llamarlo o no liderazgo femenino, creo que es liderazgo igual que el masculino, pero es cierto que suelen darle un algo especial a su manera de gestionar. Siempre suele darse una altísima orientación a las personas, son liderazgos muy enfocados a la cooperación, liderazgos generosos, colaborativos y muy resilientes.

¿Cuáles diría que son los principales estereotipos de género en los ámbitos STEM?

En Mujeres en Farma tenemos una sección centrada en las áreas industriales dentro del sector farmacéutico y aquí se evidencia claramente que hay determinadas áreas de este negocio donde la presencia de mujeres es muy baja. Faltan mujeres ingenieras, y si eso ocurre de forma general, en este sector todavía hay menos. De esto se habla mucho, porque ciertamente las formaciones de STEM se siguen percibiendo como más masculinas. Esto es algo que tenemos que trabajar desde la infancia, desde la educación en los colegios, dando visibilidad a estas áreas y dando a los niños y niñas modelos femeninos que también sean referentes. Pero también es algo a trabajar en casa. Por ello, en relación a la culpa que se suele sentir por parte de la mujer en esa difícil conciliación entre la vida profesional y la vida familiar, tenemos también que darnos cuenta de que estamos dando un referente a nuestros hijos e hijas.

¿Por qué es necesario que este sea un trabajo conjunto entre hombres y mujeres para lograr un cambio efectivo?

No tengo ninguna duda de que esto hay que hacerlo entre todos. No se trata de generar una guerra o un conflicto entre hombres y mujeres. Aquí no queremos que haya más mujeres directivas que hombres. Queremos poner en evidencia que el talento no tiene géne­ro, que la diversidad enriquece. Y avanzar en esto solo es posible si trabajamos todos juntos.

¿Qué cambios se podrían promover en el sistema educativo para incentivar la participación de la mujer en estos ámbitos?

Hay que ser capaces en todos los ámbitos, desde el colegio a la universidad, de dar modelos femeninos que sean un referente y que inspiren desde el principio a niños y jóvenes de que también existe esa realidad y esa posibilidad.

¿Hay mayor responsabilidad social por parte de las empresas en este ámbito?

En el sector farma, sin duda, hay un altísimo compromiso y por eso somos un sector referente en diversidad y en equidad. El problema es que, si bien somos un sector muy potente, en cuanto a innovación, calidad del empleo, etc., a veces nuestra reputación está un poco en entredicho. En el caso de Mujeres en Farma, recordemos de nuevo que es una organización sin ánimo de lucro, por lo que necesitamos la colaboración de las empresas para poder existir. Y la realidad es que cada vez tenemos más empresas colaborando, lo que es de por sí un dato significativo del compromiso por parte de las empresas en iniciativas de este tipo.

Precisamente, ¿cómo es vuestra colaboración con empresas, instituciones, etc.?

Estamos bajo el paraguas de la Fundación Talento MCR Acción Solidaria y a día de hoy tenemos 33 empresas colaborando con nosotras. En nuestros dos años y medio de vida, por supuesto hemos ido creciendo, pero todas las iniciales han ido renovando su colaboración, lo cual es una satisfacción. Además, cuatro de estas empresas decidieron aumentar el nivel de colaboración.

Se cumplen dos años desde su inicio, ¿qué objetivos concretos han alcanzado?

La principal satisfacción es cuando nos llegan historias de casos que han promocionado y han cambiado de posición y vemos que el trabajo se traduce en algo real y tangible. Pero sin duda en estos dos años y medio destaca que hemos logrado tener cerca de 2.000 personas asociadas a nuestra plataforma web, tenemos cerca de 13.000 seguidores en redes sociales y contamos con la colaboración de algo más de 30 empresas farmacéuticas, que en un proyecto como este, en el que no hay ánimo de lucro, son las que nos ayudan a existir. Hemos participado en más de 80 actividades y participado en más de 15 eventos externos. Todo eso es lo que nos ayuda a saber que hemos cumplido nuestros objetivos. Todo esto se ha visto reconocido recientemente al recibir el premio a la mejor institución en el ámbito biofarmacéutico y cosmético por parte de FarmaForum.

¿Y qué repercusión están teniendo sus actividades de networking, mentoring, afterworks, etc.?

Lo cierto es que la repercusión de las actividades está siendo grande y el feedback que estamos recibiendo tras la realización de estas está siendo muy bueno. Además, tenemos muy presente que Mujeres en Farma es un proyecto en movimiento y que nuestro fin es seguir creciendo. Por poner un ejemplo, el programa de ‘Dos al cubo’, que es nuestro programa de mentoring, en la primera edición que hicimos en 2022, el programa recibió 70 solicitudes y contó con la participación de 30 mentores. En la siguiente edición de este 2023, las solicitudes alcanzaron las 250 y en el programa participaron 60 mentores. Ahora estamos pensando en la tercera edición y ver hasta qué punto llegamos a dar cobertura.

Por último, ¿qué se plantean como líneas maestras a medio y largo plazo?

Tenemos la energía y las ganas para seguir creciendo y para ser más profesionales, pero sobre todo para ser más consistentes y constantes en lo que hacemos. Queremos llegar a más mujeres, queremos hacer más actividades, queremos abrir un capítulo de relaciones institucionales para adquirir visibilidad en el ámbito público. Estamos también trabajando un curso específico con una escuela de negocios, para poder realizarlo tanto en Madrid como en Barcelona. En definitiva, tenemos mucho por hacer, pero también tenemos muchas ganas,