El Grupo de Trabajo de Servicios Preventivos de los Estados Unidos (USPSTF) ha emitido una nueva declaración, publicado en la revista
JAMA, de recomendación que destaca la
importancia de intervenir tempranamente en niños y adolescentes con un alto índice de masa corporal (IMC). Esta medida llega en un momento crítico, ya que aproximadamente el 19,7% de los niños y adolescentes de 2 a 19 años en los EE. UU. tienen un IMC igual o superior al percentil 95 para su edad y sexo, según las tablas de crecimiento de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
Contexto del Problema
La prevalencia de un IMC alto en jóvenes aumenta con la edad y es más común entre ciertas poblaciones, incluidas los hispanos/latinos, nativos americanos/nativos de Alaska, negros no hispanos y niños de familias de bajos ingresos. Estos datos subrayan la
necesidad de enfoques específicos y eficaces para abordar la obesidad infantil y adolescente.
Objetivo de la Revisión
El USPSTF encargó una revisión sistemática para evaluar la evidencia sobre las intervenciones disponibles para la pérdida de peso o el control del peso en niños y adolescentes.
La revisión se centró en dos tipos principales de intervenciones: el asesoramiento conductual y la farmacoterapia, las cuales pueden ser proporcionadas o derivadas desde un entorno de atención primaria.
Hallazgos y Recomendaciones
El USPSTF concluye con certeza moderada que proporcionar o derivar a niños y adolescentes de 6 años o más con un IMC alto a intervenciones conductuales integrales e intensivas tiene un beneficio neto moderado. Basado en estos hallazgos, el USPSTF ha emitido una recomendación de grado B, lo que significa que los médicos deben proporcionar o remitir a estos jóvenes a
programas de intervención conductual intensiva.
Intervenciones Conductuales
Las intervenciones conductuales recomendadas por el USPSTF suelen incluir múltiples componentes, como la educación nutricional, la promoción de la actividad física, la modificación del comportamiento y el apoyo psicológico. Estos programas, que pueden durar varios meses, están diseñados para ayudar a los jóvenes a adoptar hábitos saludables y mantener un peso adecuado a largo plazo.
Impacto Esperado
Esta recomendación se espera que tenga un impacto significativo en la lucha contra la obesidad infantil en los Estados Unidos, al proporcionar un marco claro para que los médicos y otros profesionales de la salud puedan actuar de manera proactiva. Al abordar el problema desde una edad temprana, se pueden
prevenir numerosas complicaciones de salud a largo plazo asociadas con la obesidad, como la diabetes tipo 2, enfermedades cardíacas y problemas de salud mental.
Desigualdades en Salud
El informe también destaca la necesidad de prestar atención especial a las poblaciones más afectadas por la obesidad. La alta prevalencia de IMC elevado en grupos específicos sugiere que las intervenciones
deben ser culturalmente sensibles y accesibles para todas las familias, independientemente de su nivel de ingresos.
Próximos Pasos
Para implementar estas recomendaciones, será crucial contar con el apoyo de políticas públicas y la colaboración de múltiples sectores, incluidos el educativo y el comunitario. Además, es fundamental continuar investigando para optimizar estas intervenciones y asegurar que sean efectivas para todos los niños y adolescentes, especialmente aquellos en situaciones de vulnerabilidad.
En resumen, la nueva declaración de recomendación del USPSTF
representa un paso importante hacia la mejora de la salud infantil y adolescente en los Estados Unidos, proporcionando una guía clara y basada en evidencia para abordar uno de los problemas de salud más urgentes de nuestro tiempo.