Las personas que sufren de fracturas causadas por la osteoporosis o el debilitamiento de los huesos tienen ahora otra opción para reducir el dolor, restaurar la función y mejorar la calidad de vida de la columna vertebral gracias a un implante hecho de un polímero de uso médico, según las conclusiones de un estudio realizado en 300 pacientes tratados con este nuevo tipo de aumento vertebral.
Los resultados de este estudio multicéntrico, aleatorio, controlado del nuevo tratamiento de implante para fracturas vertebrales por compresión se hacen públicos este lunes por primera vez en la 39 Reunión Científica Anual de la Sociedad de Radiología Intervencionista y se publican en 'Journal of Vascular and Interventional Radiology'.
El implante está diseñado para tratar las fracturas vertebrales por compresión dolorosas y debilitantes, que hacen que los huesos de la columna se colapsen y, sin tratamiento, puede producir dolor y cifosis de la columna vertebral.
Recientemente aprobado por la agencia norteamericana del medicamento (FDA), el implante proporciona una nueva alternativa de tratamiento a la vertebroplastia y la cifoplastia, los tratamientos actuales para estos pacientes. El implante demostró que cumple o supera el rendimiento de la cifoplastia en todos los valores estudiados.
'Éste es el primer método nuevo de tratamiento de estas fracturas dolorosas en una década, lo que es una gran noticia para los pacientes, ya que no sólo ayuda a restaurar su calidad de vida, sino que también ha demostrado superar al tratamiento más utilizado de manera importante', subraya el autor principal del trabajo, Sean M. Tutton, profesor de Radiología, Medicina y Cirugía en el Colegio Médico de Wisconsin en Milwaukee, Estados Unidos.
'Este ensayo en fase 1, que ofrece la más alta calidad y los datos más fiables, es uno de los más grandes hasta la fecha en el que se compara un nuevo tratamiento para las fracturas vertebrales por compresión y sus resultados coinciden o superan a los del tratamiento actual', afirma Tutton. 'Esta investigación también se suma al creciente cuerpo de evidencia que apoya la eficacia y seguridad de estos tratamientos', añade.
El 'Kiva System as a Vertebral Augmentation Treatment A Safety and Effectiveness Trial (KAST)' se llevó a cabo con 153 pacientes con una o dos fracturas de compresión vertebral osteoporótica dolorosa que recibieron el nuevo implante y 147 a los que se les aplicó la cifoplastia con balón. Los pacientes fueron tratados en uno de 21 centros en Estados Unidos, Canadá, Bélgica, Francia y Alemania y fueron seguidos durante un año.
Los resultados del estudio confirmaron que el implante proporciona esencialmente la misma cantidad de alivio del dolor y mejoría en la función diaria según medidas aceptadas del dolor y la función (escala analógica visual, VAS, 'Oswestry Disability Index', ODI) y la seguridad. Los investigadores también vieron que los pacientes con el implante tenían más probabilidades de beneficiarse de una reducción en el ángulo de la cifosis y menos probabilidades de sufrir una fuga de cemento óseo.
Además, el estudio mostró una tendencia clínicamente importante en la que los pacientes con implantes registraban menos probabilidades de padecer una fractura en la vértebra adyacente. Este último hallazgo se produce a pesar del hecho de que los 153 pacientes que recibieron el implante registraban mayores predicciones de riesgo de futuras fracturas.