Las cifras de prevalencia de la obesidad en España no dejan de aumentar. Pese a vislumbrarse un ligero estancamiento, “es más que posible que solo estemos viendo la punta del iceberg”, clama la presidenta de la Sociedad Española de Obesidad (
SEEDO). “El hecho de que la obesidad aún no se considere como una enfermedad, lo que es, hace que
no haya registros de pacientes, por lo que no sabemos la dimensión real del problema”.
Esa es la principal reivindicación que han hecho los directivos de la SEEDO en la presentación a los medios de comunicación del programa de su XVII Congreso Nacional. “Es fundamental que
las instituciones sanitarias reconozcan la obesidad como una enfermedad tal como estableció la Organización Mundial de la Salud (OMS) para que podamos establecer planes integrales de abordaje”, señala la doctora Mar Malagón.
Según los datos que maneja la sociedad, se trata de una enfermedad crónica que, en España,
tiene una prevalencia del 20 % de la población. Cifra que asciende hasta el 60 % en el caso del sobrepeso y que podría ser mucho mayor. Además, actúa como puerta de entrada de otras enfermedades graves como la diabetes y, en datos absolutos, es la quinta causa de mortalidad en el mundo, explica la endocrinóloga.
Plan europeo de obesidad
Para paliar estos datos, desde SEEDO piden la creación de planes nacionales y un plan europeo que establezcan las
directrices para el manejo integral de esta enfermedad. Proyectos que no podrán llevarse a cabo si clínicos y políticos no hablan el mismo lenguaje. Por eso, en el congreso que hoy comienza, la sociedad científica va a contar por primera vez con la participación de responsables de la administración.
Los pacientes son también otro de los pilares fundamentales a la hora de hablar del tratamiento. De hecho, ellos también reivindican el reconocimiento de la obesidad como enfermedad para que se les considera pacientes. “El mero hecho de que no lo sea
nos lleva a no tener derecho de garantía como pacientes”, ha explicado Federico Luis, director ejecutivo de la Asociación de Pacientes Bariátricos y Obesidad (ABHispalis).
Financiación de tratamientos
Un tratamiento que debe ser totalmente individualizado, indica el doctor Cristóbal Morales, vocal de SEEDO. “No hay una obesidad igual a otra,
porque inciden numerosos factores como la genética, la biología, la educación cultural, la diferencia de género… conocerlos ayuda a establecer estrategias de prevención y tratamiento”, explica. Una prevención que, según el especialista, debería iniciarse desde el mismo momento del nacimiento.
“Hablamos de una patología con mayúsculas que, además,
impacta directamente en la calidad de vida del paciente al que se culpabiliza de su propia enfermedad”. Por eso, para el doctor Morales es fundamental actuar de forma coordinada y multidisciplinar con el objetivo de cambiar el futuro de las personas que viven con esta ella. No en vano, asegura que la obesidad está directamente
relacionada con otras 200 patologías.
Ahorro de gasto sanitario
Sin embargo, hay motivos para el optimismo, ya que señala que hay medicamentos que están funcionando muy bien y otros tantos que vienen de camino y estarán disponibles a lo largo de 2023 y 2024.
Fármacos para los que ha pedido la financiación sanitaria ya que supondría un ahorro para el sistema sanitario.
En este sentido, la doctora Andrea Ciudin, presidenta del Comité Organizador del Congreso, ha ofrecido datos del gasto que supone la enfermedad. Son cálculos de la Asociación Europea de la Obesidad (EASO, por sus siglas en inglés) que estiman que
el coste directo supone el 7 % del PIB de un país más un 8,5 % adicional de las complicaciones que conlleva. En el caso de España, el coste de la obesidad asciende al 9,7 % del gasto total en salud, apunta la doctora Malagón.
“Un montante que se ahorraría el Gobierno de financiarse los medicamentos para las personas con obesidad”, ha dicho. De hecho, -ha agregado Ciudin- “hay estudios que han demostrado que el manejo de la obesidad
ha supuesto la prevención de un 90 % de diabetes”. Tampoco hay que olvidar que
la vida sedentaria también incrementa el gasto sanitario.
Para el doctor Albert Lecube, vicepresidente de SEEDO, la clave no es preguntarse por el gasto, sino por
el coste que supone la inacción. “¿Sabemos el dinero que se está perdiendo para tratar las complicaciones y las comorbilidades provocadas por la obesidad?”, cuestiona.
Programa científico y manifestación
Este profesional ha sido el encargado de destacar la calidad científica del programa del Congreso en un año en el que SEEDO cumple tres décadas de existencia y
ha roto su techo superando los 1.300 socios. El doctor Lecube ha subrayado la participación de colegas internacionales: latinoamericanos, italianos y portugueses que compartirán sus experiencias con los clínicos españoles.
Otra de las características del encuentro es el
punto de transversalidad que quieren darle al manejo de una enfermedad que requiere de la
colaboración de otras especialidades. “Es importante que se entienda que la obesidad es una enfermedad compleja que por su origen multifactorial requiere mucho estudio y mucha interacción con otros profesionales y los pacientes”, explica.
Como colofón, en el marco del congreso, SEEDO ha convocado una
manifestación en favor de las personas que viven con obesidad. Será el 17 de noviembre a las 13h en Barcelona y a la que han invitado a sumarse a otros facultativos que también tienen que tratar la obesidad.