La adherencia al tratamiento del paciente con
dolor irruptivo oncológico (DIO) necesita la formación tanto del paciente como del profesional sanitario que le atiende. Es habitual que las personas con DIO no manifiesten la presencia de este síntoma si su médico no se lo pregunta expresamente.
En la práctica, el paciente no sabe expresar de forma adecuada el concepto que el médico entiende como DIO. En ocasiones, hace comentarios como
“me dio un dolor muy fuerte, pero se fue de repente”. Estas definiciones de dolor deben hacer sospechar al médico, quien, mediante una anamnesis dirigida, debe plantearse un posible diagnóstico de DIO.
Para evitar el infradiagnóstico de este tipo de dolor, el médico debe preguntar expresamente a su paciente con enfermedad oncológica el tipo de molestias que siente. Y así, valorar si tiene dolor muy intenso y de corta duración.
Hay que
determinar bien las características del dolor para hacer un buen diagnóstico y definir un tratamiento correcto, con su correspondiente seguimiento. Para ello puede resultar muy útil el empleo de la escala EVA, ya que posiblemente el paciente desconoce el DIO.
Definición del tratamiento
Los
rapid-onset opioids (ROO) son el tratamiento ideal para el DIO, ya que la curva que sigue típicamente este tipo de dolor, de ascenso súbito y corta duración, queda cubierta por la farmacocinética de estos fármacos. Obviamente, los fármacos de acción retardada no tienen la misma efectividad inmediata.
Los ROO se recomiendan como tratamiento previo a la acción que lo desencadena. En la práctica, los pacientes toman menos cantidad de fármacos de lo recomendado, es decir, menos de tres rescates al día, aunque necesiten más. Para evitar esta circunstancia, se recomienda informar al paciente del proceso de su tratamiento.
Opioides orales de inicio de acción lento
Como se ha comentado, los opioides orales, por su inicio de acción lento, resultan inadecuados para pacientes con DIO. Y es que pueden comenzar la analgesia después de que el dolor haya disminuido y, en consecuencia, se producen efectos adversos.
Los opioides de acción lenta sirven para controlar el dolor basal, pero cuando se presenta como irruptivo, necesita fármacos de diferente tiempo de acción y duración. En concreto, se recomienda la forma sublingual para toma ambulatoria, ya que es muy rápida, cómoda y eficaz. El fármaco elegido debe tener una vida media corta y conseguir un beneficio inmediato.
Perfiles farmacocinéticos del fentanilo
En la práctica clínica, es fundamental conocer los perfiles farmacocinéticos de las diferentes formulaciones de fentanilo para tratar el DIO. El tratamiento se debe ajustar en función del tipo de dolor de cada paciente, su duración, etc.
El médico necesita formación actualizada respecto a las formas galénicas y su aplicabilidad. También debe saber cómo se metaboliza el
fármaco. Y, por supuesto, las posibles interacciones, la eliminación, los metabolitos clínicamente significativos, el inicio de acción o la biodisponibilidad, entre otras cuestiones.
Para la elaboración de este artículo se ha contado con la colaboración de los doctores
Sandra Soriano Sánchez, Pablo Andreu Cobo, Carla Climent Vicente, Natalia López Zurita, Javier González Viguera, Nagore García Expósito, César Marc Juárez Lozano y
Milica Stefanovic.