Recientemente ha tenido lugar en Barcelona la XVII Conferencia Anual de las Plataformas Tecnológicas de Investigación Biomédica, la gran cita de la investigación biomédica en España, que impulsa la Plataforma Tecnológica Española de Medicamentos Innovadores de
Farmaindustria en colaboración con las plataformas de Fenin, Asebio, Veterindustria y Nanomed. En la misma se ha puesto de manifiesto que España tiene una oportunidad única de convertirse en un referente en investigación biomédica. Es decir, incluyendo investigación básica, preclínica, traslacional y clínica. No obstante, España ya es el
primer país de Europa en número de participaciones en ensayos clínicos de nuevos medicamentos y ahora el reto es
trasladar este liderazgo a las fases preclínica y traslacional
En la inauguración de la jornada, la vicepresidenta de Farmaindustria, Fina Lladós, ha destacado que “
España es hoy líder en ensayos clínicos en Europa. Esta posición hegemónica se ha conseguido gracias al trabajo colaborativo entre Administración pública, AEMPS, investigadores, hospitales, clínicos, comités de ética, pacientes y compañías farmacéuticas. Ahora estamos en un momento único para
convertir a nuestro país en un hub mundial de innovación, referente en investigación biomédica”.
Referente en investigación biomédica
Durante el encuentro se han podido abordar diferentes iniciativas para conseguir una mayor participación de las comunidades autónomas en la investigación clínica, del necesario impulso de la transferencia de conocimiento, de cómo acelerar la innovación en salud
One Health y, sobre todo, de la capacidad de nuestro país de convertir el conocimiento en soluciones innovadoras con impacto social y económico.
Para hacer frente a este gran desafío que nuestro país tiene por delante, los principales impulsores de las plataformas proponen, además de fomentar la colaboración público-privada, sacar el máximo partido a la transformación digital aplicada a la innovación biomédica.
Otro de los desafíos que ha abordado la jornada es el de conseguir que la actividad científica en innovación biomédica dé sus frutos, para lo que es crítico que nuestro país realice
inversión pública en investigación biomédica básica, en universidades, hospitales y otros centros, y a la vez se fomente la colaboración con la iniciativa privada para dar continuidad a esos proyectos