Si bien parece que la Sanidad no ha sido uno de los temas estrella en los debates televisivos, los portavoces de Sanidad de los diferentes partidos sí que se han prestado a participar en diversos debates para presentar sus propuestas en materia sanitaria. Pese a lo diverso de las mismas, uno de los puntos en los que todos los candidatos han coincidido, en el debate organizado por la Asociación Nacional de Informadores de la Salud (ANIS), ha sido la necesidad de realizar una reforma en la financiación sanitaria.
Para empezar, José Ignacio Echániz explicaba que en el Partido Popular 'consideramos una prioridad abrir un nuevo sistema de financiación'. Especificando más su propuesta, José Martínez Olmos, del Partido Socialista, apostaba por subir un punto el porcentaje del PIB dedicado a Sanidad, pero además hacer reformas como derogar el RDL 16/2012 y eliminar el copago farmacéutico de los pensionistas, además de reorganizar la cartera de servicios para que esta sea una única para toda España.
Por su parte, el portavoz de Ciudadanos, Francisco Igea insistía en que 'no pondremos copagos ni repagos', en cambio proponía analizar los presupuestos de cada una de las Comunidades Autónomas para hacerlo más realistas y finalistas. Podemos, representado por Ana Castaño, cifraba en 10.000 millones de euros el aumento previsto para la partida de Sanidad en el total de la nueva legislatura, pero además matizaba que su idea pasa por 'vincular el presupuesto en salud no tanto al PIB, sino a la renta per cápita'. En último lugar, José Antonio Llamas, hablando en nombre de Unidad Popular- Izquierda Unida, puntualizaba que para reformar el presupuesto sanitario 'hay que reformar antes la progresividad fiscal, los SICAV, y hacer una reforma del IRPF', puesto que para el grupo político 'el mayor problema de salud es la desigualdad'.
Profesionales y pacientes
Otro de los temas más debatidos es cómo se va a mejorar la situación de los profesionales sanitarios, uno de los grupos más afectados por los recortes durante la crisis económica. En este sentido, desde el Partido Popular, Echániz hablaba de 'un plan estratégico de ordenación de los recursos humanos', en el que se revisen cuestiones como el numerus clausus o la movilidad de los profesionales. Por su parte, Ciudadanos se comprometía a trabajar para motivar a este colectivo, puesto que desde su perspectiva 'ha sido uno de los más castigados', pero a su vez, los incluía en una de sus medidas dentro de su portal de transparencia, insistiendo en que la formación continuada no pueda ser financiada por la industria farmacéutica sino con financiación pública, para que 'los profesionales no accedan a congresos financiados por la Industria'.
Implicando no solo a los profesionales, sino también a los pacientes, José Martínez Olmos anunciaba que el PSOE pretende realizar 'un plan de choque para las listas de espera', revisando el RDL que plantea unos tiempos máximos para las mismas 'que se están incumpliendo'. Por su parte, tanto Podemos como IU mencionaban que les han llegado denuncias de pacientes que en el caso de no querer ser derivados a centros privados eran sancionados quedando relegados en las listas de espera, y que todo esto debía ser ampliamente revisado.
Salud Pública y dependencia
Los periodistas sanitarios encargados de abrir el turno de debate no se olvidaban de la Salud Pública, y en este sentido, Martínez Olmos también mencionaba que el PSOE plantea realizar una Estrategia Nacional de Obesidad, mientras que Podemos e IU hablaban de la importancia de hacer educación de la salud también en los colegios, ya que la medicalización de la vida empieza en los niños, citando el caso del exceso de fármacos para el tratamiento de la hiperactividad y el déficit de atención.
Otro tema clave era el de la dependencia, a lo que el Partido Popular aludía a la necesidad de crear más empleo para tener un mayor presupuesto para la atención a los Servicios Sociales, mientras que el PSOE reiteraba su apoyo a la recuperación de esta ley. Por último, a raíz de este debate, Ana Castaño también anunciaba que desde Podemos se propone abrir el debate para una futura ley derecho a muerte digna.