El Dr. David Williams, presidente del Board de Urgencias y Emergencias de la Unión Europea de Médicos Especialistas (UEMS) ha enviado una carta al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y a la Ministra de Sanidad, Ana Mato, solicitando la creación en España de la Especialidad de Medicina de Urgencias y Emergencias.
En la misiva, el Dr. Williams alude a la existencia de la Especialidad de Medicina de Urgencias y emergencias (MUE) en 17 países de la Unión Europea, que se incluirán en el anexo que acompañará a la reciente actualización de la Directiva de Cualificaciones Profesionales, y publicada en el boletín de la Unión europea en diciembre de 2013.
Así mismo el doctor Williams hace alusión a la realidad de la existencia de esta especialidad primaria como sección en la UE, y requisito imprescindible para la libre circulación de estos profesionales en el mercado europeo.
'Los mensajes de campaña en las reciente elecciones europeas han ido en el sentido de converger en legislación con nuestros países homólogos. Esto, junto a la formación adecuada de los profesionales y la innovación, son requisitos clave para generar crecimiento económico', ha señalado el doctor González Armengol, presidente de la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (SEMES).
'En este sentido, es incomprensible el actual planteamiento del Ministerio de Sanidad, que nos hace retroceder como país 20 años y nos aleja del entorno europeo y mundial establecido, al encajar Urgencias como un área de capacitación con el doble de tiempo en formación y en recursos económicos, dependiendo de especialidades que no tienen ninguna vinculación con el ejercicio de nuestra profesión', añade Armengol.
El Dr. Williams certifica en su carta el reconocimiento internacional que ha alcanzado y mantiene Emergencias, la revista científica de SEMES, única en España en el primer cuartil de su especialidad, y tercera en el mundo por impacto científico.
'Es incomprensible que se penalice el esfuerzo, el reconocimiento exterior y el derecho a la movilidad, únicamente por servir a intereses fuera, además, del derecho a la seguridad y la protección de la salud de los pacientes que atendemos en estos servicios. Si algo se está moviendo en la opinión pública española hace tiempo es acabar con este tipo de actitudes de sesgo personal y que van en contra de la propia línea de acción anunciada por el actual Gobierno', concluye Armengol.