En este manual se desgranan diez situaciones reales de consulta oncológica en pacientes con edades superiores a 65 años
La Sociedad Española de Oncología Médica y Fundación Merck Salud han presentado el primer Manual SEOM de casos clínicos en Oncogeriatría. El uso de la valoración geriátrica integral, el manejo de la toxicidad del tratamiento, la polifarmacia o los síndromes geriátricos son algunos de los…
La Sociedad Española de Oncología Médica y Fundación Merck Salud han presentado el
primer Manual SEOM de casos clínicos en Oncogeriatría. El uso de la valoración geriátrica integral, el manejo de la toxicidad del tratamiento, la polifarmacia o los síndromes geriátricos son algunos de los temas que aborda este manual.
El documento, que recoge el trabajo de 46 residentes y adjuntos de distintas instituciones médicas españolas, busca dar a conocer esta disciplina, la Oncogeriatría. Su objetivo radica en compartir conocimiento, estrategias y
avances en esta materia. Igualmente, ofrecer
herramientas a los especialistas para el manejo del cáncer en el paciente anciano. Para ello, este manual desgrana
diez situaciones reales de consulta oncológica en pacientes con edades superiores a 65 años.
Presentación del manual de Oncogeriatría
La presentación del manual ha tenido lugar en la sede de la Fundación Pons de Madrid. Sobre el mismo opinaba Carmen González Madrid, presidenta de la Fundación Merck Salud. “Este tipo de trabajos son muy prácticos, sirven para mostrar una realidad y
aprender los abordajes en pacientes”.
Todos los expertos se han mostrado de acuerdo en que “la Oncología geriátrica debe de ir más allá del tratamiento del tumor y del proceso medicamentoso”. Así, este manual insiste en que la Oncogeriatría debe tratar la parte cognitiva, social y física para aumentar la calidad de vida de los pacientes. De esta forma,
el manual recoge intervenciones de forma sencilla y coste-efectiva en tiempo y recursos. Pone al paciente en el centro para diagnosticar e intervenir de forma eficaz.
Algunas de sus conclusiones son que
la escala G8 puede ser una herramienta adecuada para el cribado inicial. También que la presencia de síndromes geriátricos da información de la reserva funcional del individuo y ayuda a planificar los tratamientos oncológicos.
Otra conclusión es que
la depresión es el trastorno psicológico más común en los pacientes adultos mayores con cáncer. Su tratamiento es fundamental para mejorar la calidad de vida. Igualmente, la malnutrición es frecuente en los pacientes adultos mayores con cáncer y otro de los retos a abordar.
