La Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap), recuerda que, pese a los avances de la última década, aún queda mucho camino por recorrer para alcanzar la plena igualdad entre sexos. También en la infancia y adolescencia. En este sentido, señala que es necesario
trabajar para proteger a las menores frente a la violencia de género. Esta es una labor que implica a toda la sociedad. Pero, de manera especial, “de los profesionales que estamos más implicados en su cuidado”, explica la presidenta de AEPap, Concepción Sánchez Pina.
Por ello, con motivo del Día Internacional de la Niña, la AEPap señala que existen varios tipos de violencia de género contra las menores y que es necesario tomar conciencia social de los mismos. Profundizaba en este tema Pedro Gorrotxategi, vicepresidente de AEPap. “En primer lugar, cuando son
acosadas por sus parejas o amigos. Es algo que ya detectamos desde las consultas de pediatría de Atención Primaria”. Sin embargo, también hay una segunda forma de violencia de género, que afecta tanto a niñas como a niños. Esta es cuando son
testigos, directos o indirectos de la violencia contra sus madres. “Es un tipo de violencia que no debemos olvidar”, manifiestan desde la AEPap.
Menores frente a la violencia de género
“En Pediatría de Atención Primaria somos mayoría de mujeres. Estamos muy sensibilizados con las situaciones de menores frente a la violencia de género.”, destaca Sánchez Pina. Y es que esta se practica en la mayoría de las veces contra las niñas y sus madres. Sobre todo, en el caso de los
abusos sexuales, que son también más frecuentes en las niñas y adolescentes.
Como explica la experta, los pediatras de Atención Primaria, los docentes, trabajadores sociales, pero también los jueces y fiscales, que somos los que más relación directa tenemos con estos casos, debemos
estar alerta para garantizar a todos los menores la especial protección que merecen”, afirma. “Pedimos a los tribunales y autoridades que sean sensibles a este problema y sigan defendiendo el interés superior del menor”, concluye.
