En España se diagnostican casi 30.000 nuevos casos de cáncer de pulmón al año. Más del
70 % de ellos son inoperables y la supervivencia no supera el 15 % a los 5 años.
Está demostrado que el cribado de esta enfermedad, utilizando la
TAC de baja dosis, supone un cambio de paradigma al permitir la detección precoz del tumor y reducir su mortalidad. Veinte años de experiencia del proyecto iELCAP, una cohorte internacional que cuenta con la participación de varios centros españoles, avalan esta afirmación.
Tras cribar a casi 90.000 individuos de todo el mundo, la supervivencia de los pacientes con cáncer de pulmón diagnosticado por cribado fue del 81 %, una cifra muy superior a la que nos tiene habituados esta enfermedad cuando el paciente acude sintomático a la consulta.
Este hallazgo, publicado en la prestigiosa Radiology el mes pasado, confirma los hallazgos de ensayos clínicos como el NLST, NELSON, o MILD que también demostraron un claro beneficio del cribado. La Comisión Europea y sus expertos apuestan por esta estrategia, financiando el emblemático proyecto SOLACE, que también incluye la
participación de un centro español, y que se inició en abril de 2023 para consolidar la implementación del cribado de cáncer de pulmón en toda Europa.
Proyecto CASSANDRA
El pasado mes de noviembre dimos la buena noticia del reclutamiento de los primeros voluntarios sanos para el proyecto CASSANDRA (Cancer Screening, Smoking Cessation and Respiratory Assessment), que está liderado por la
Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) y cuenta con la colaboración de nueve sociedades científicas, asociaciones y fundaciones de pacientes, y la Lung Ambition Alliance.
Se trata de un proyecto piloto asistencial multicéntrico cuya intención es demostrar la
viabilidad del cribado en nuestro país, y dar así la evidencia científica que reclama la reciente actualización de la estrategia nacional de cáncer. Se ofrecerá la participación en el proyecto a individuos asintomáticos, mayores de 50 años y con una
exposición tabáquica acumulada de al menos 20 paquetes por año, sean fumadores o exfumadores con menos de 15 años de abstinencia,
Estos programas de cribado poblacionales -financiados por el Sistema Nacional de Salud- son diseñados, organizados, pilotados y supervisados por las Consejerías de Sanidad de las Comunidades Autónomas . En noviembre, la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid manifestó su apoyo a esta iniciativa y más de
12 centros cuentan ya con la aprobación de sus comités de ética para iniciar el cribado.
Investigación para reducir muertes
El proyecto CASSANDRA considera que hay aspectos del cribado con un importante impacto en su efectividad y factibilidad que es preciso investigar y analizar en España. La visión de este ambicioso proyecto centrado en el paciente tiene varios ejes de actuación, entre los que destacan la
integración de la prevención primaria en el cribado, la realización de espirometrías, y el aprovechamiento de la TC de baja dosis para completar una valoración global del fumador o exfumador.
Recordemos además que el cáncer de pulmón no es la única patología letal asociada al tabaquismo que se puede detectar mediante una TC de baja dosis. El enfisema, la EPOC, las enfermedades intersticiales, o las enfermedades coronarias, también lo son. CASSANDRA promete aprovechar estos beneficios colaterales del cribado para optimizar el mismo y conseguir reducir la mortalidad de esta y otras enfermedades con un proyecto ambicioso que incorpora más de 40 centros de todo el territorio nacional.
Además de los objetivos ya mencionados, CASSANDRA ha creado un registro nacional que incluye datos epidemiológicos y el abordaje de la imagen mediante técnicas de inteligencia artificial para homogeneizar y aprovechar al máximo los hallazgos de la exploración radiológica. Su intención es determinar la sensibilidad y especificidad del cribado en nuestro Sistema Nacional de Salud y valorar el potencial impacto de sus efectos adversos en la población cribada. CASSANDRA cuenta también con un comité científico y una CRO externa que velarán por la integridad del proceso, la protección de datos de carácter personal y la calidad de la oferta asistencial.
El proyecto CASSANDRA nace tras varios años de esfuerzo y gracias a la dedicación de incontables profesionales, en el seno del año SEPAR 2023-24 de detección precoz del cáncer de pulmón. Es un año para la ilusión, un año para soñar con un mundo en el que
el cáncer de pulmón deje de ser una sentencia de muerte.