Hasta el año 2011 se tenía un registro de 1.700.000 pacientes con artritis reumatoide en México y se sabe hasta la fecha que se manifiesta en edad productiva, es decir, a partir de los 18 años y puede provocar discapacidad en casos severos.
La artritis reumatoide es una enfermedad autoinmune crónica que afecta al 1.6 por ciento de los adultos mexicanos y es más recurrente en mujeres que en hombres, por cada seis mujeres con este padecimiento hay un caso masculino. Se han desarrollado diversos tratamientos como fisiológicos como farmacológicos pues no cuenta con una cura.
El Comité de Medicamentos de Uso Humano (CHMP) de la Agencia de Medicamentos Europea (EMA) adoptó una opinión positiva al recomendar el nuevo tratamiento oral del laboratorio Pfizer para artritis reumatoide en el tratamiento de la enfermedad en etapas moderadas a severas, y será ahora enviado a la Comisión Europea para su aprobación final.
La opinión de la CHMP se apoya del programa de desarrollo global ORAL (Oral Reumathoid Arthtiris Phase 3 TriaLs), el cual demostró la seguridad y eficacia del tratamiento al contar con un acumulado de más de 19,000 años-paciente en exposición en más de 6,100 pacientes e incluyó observaciones de seguimiento de hasta 8 años
A pesar de ser el único tratamiento oral inhibidor de la quinasa Janus (JAK), aprobado en México para pacientes adultos, y que está ya comercializado en más de 50 países alrededor del mundo 'incluido México, aún no ha sido aprobado para su uso en el continente Europeo.
Más de 2.9 millones de personas en Europa viven con artritis reumatoide moderada o severa. Incluso utilizando múltiples opciones terapéuticas, muchos de ellos pueden no responder adecuadamente a los tratamientos disponibles al momento.
Es necesario estar pendientes de los síntomas, sobre todo si hay un antecedente familiar para hacer una detección temprana y comenzar con un tratamiento adecuado ya que puede aparecer entre los 22 y 55 años y los síntomas pueden ser tan simples como cansancio recurrente, dolor en las articulaciones y fiebre.
Los especialistas del Colegio Mexicano de Reumatología recomiendan fortalecer los métodos de farmacovigilancia pasiva y activa para estimar riesgos y tomar decisiones siempre en beneficio del paciente según la actualización de la Guía Mexicana para el Tratamiento Farmacológico de la Artritis Reumatoide.