Rechazo frontal de médicos, industria y pacientes al visado de inspección de medicamentos

José García, Madrid.- Médicos, industria farmacéutica y asociaciones de pacientes han manifestado su rechazo frontal al establecimiento de visados de inspección de medicamentos, ya que, a su juicio, es una figura 'perniciosa' que modifica el criterio terapéutico del facultativo. enturbia su relación con el paciente, al que estigmatiza. impide el acceso a fármacos innovadores. y, además, el ahorro en gasto sanitario con su aplicación es inapreciable.

Así se recoge en el Informe del Instituto de Estudios Médico-Científicos (INESME) sobre 'los visados: contención del gasto o calidad asistencial', presentado en Madrid y resultado de un foro de debate en el que han participado representantes de todos los sectores que, de una forma u otra, se ven implicados en la regulación, fabricación, prescripción y consumo de medicamentos.

El director técnico de Farmaindustria, Emili Esteve, ha distinguido entre los llamados 'visados sanitarios', que afectan a 600 especialidades, se basan en criterios científicos, tienen un carácter universal y son predecibles, y los visados 'economicistas', que afectan a menos de una decena de especialidades, 'no se producen en el momento de la autorización del fármaco', son 'impredecibles' y 'sectoriales', al afectar a una determinada Comunidad Autónoma.

Según Esteve, los segundos son 'muy perniciosos' tanto para la industria como para los profesionales sanitarios y los pacientes, ya que afectan a los medicamentos innovadores, con lo que de cara al exterior hacen perder credibilidad a un país. modifican la relación médico-paciente al determinar algunos tratamientos. y la alternativa terapéutica en muchos casos es 'muy mala'. A su juicio, los visados 'con carácter sectorial y economicista' no tienen una base legal clara, ya que dependen de la Administración Central, a través de la Dirección General de Farmacia, pero son las Comunidades Autónomas las que lo aplican.

De esta forma, en 2001 Andalucía impuso el visado a los inhibidores específicos COX-2, para tratar la artrosis. Esta medida fue recurrida por el Ministerio de Sanidad por conflicto de competencias aunque finalmente el visado se amplió a todo el territorio nacional en 2002. Un año más tarde, de nuevo Andalucía decide imponerlo a otros fármacos, los antipsicóticos atípicos para tratar la esquizofrenia. La medida, que entró en vigor en septiembre de 2003, fue recurrida tanto por el Ministerio de Sanidad como por Farmaindustria y, aunque en un principio en marzo de 2004 el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía suspendió cautelarmente su aplicación, unos meses más tarde, ante el recurso de la Junta de Andalucía, el visado para los antipsicóticos atípicos volvió a entrar en vigor hasta que el Tribunal se pronuncie de nuevo.

El representante de la industria farmacéutica se ha mostrado contrario a los visados 'que entran por la puerta de atrás', ya que 'son medidas que no tienen un trasfondo sanitario'. Además, el ahorro en el gasto sanitario 'no es patente' aplicando los visados, ya que lo que una Comunidad Autónoma se ahorra en la factura farmacéutica con esta medida, se gasta en otras partidas. Para Esteve, las nuevas terapias tienen más ventajas respecto a tratamientos anteriores y 'volver a lo antiguo siempre sale más caro'. En su opinión, los visados obedecen a que las CC.AA. 'buscan una vía para ajustar sus cuentas y, al final, los que salen perjudicados son industria, médicos y pacientes'.

Asimismo, Esteve ha señalado que 'el visado es una herramienta a extinguir. El futuro pasa por la receta electrónica y por la ayuda a la prescripción'. A su juicio, 'es cierto que las autoridades tiene que ejercer acciones para sostener el crecimiento del gasto farmacéutico, pero estas acciones deben ir por la vía de la convicción, no por la imposición'.

Visado a los antipsicóticos atípicos

Por su parte, el representante de los facultativos en la presentación de este informe, el doctor José Giner, jefe del servicio de Psiquiatría del Hospital Virgen de la Macarena de Sevilla, se ha referido más en concreto a los visados sobre los antipsicóticos atípicos en Andalucía. 'Aplicar el visado a enfermos esquizofrénicos es una auténtica falacia', ha dicho este especialista, quien considera que 'este tipo de trabas aumentan la enfermedad, dificultan la relación médico-paciente y la adherencia al tratamiento y potencia la estigmatización social del enfermo esquizofrénico. Además, muchas veces obliga al facultativo a mentir respecto al diagnóstico del paciente para que se le pueda prescribir la mejor opción terapéutica, muchas de ellas sometidas a visado'.

Finalmente, el presidente del INESME y director del servicio de Farmacología Clínica de la Clínica Universitaria de Navarra, Jesús Honorato, se ha referido a los visados como 'una figura que se interpone entre el médico y el paciente, condiciona los tratamientos y modifica el criterio terapéutico de los facultativos, lo que, en última instancia, perjudica a los pacientes'.