El tratamiento del accidente cerebrovascular agudo, antes de que se pueda distinguir entre los tipos isquémico y hemorrágico, es un desafío. Reducir la presión arterial es la clave tanto en la prevención primaria de la enfermedad como en la secundaria para evitar su recidiva. Sin embargo, el efecto beneficioso que tiene la reducción de la presión arterial no está demostrado durante la fase aguda del ictus, es decir no se sabe con certeza si el control muy temprano de la presión arterial mejora los resultados entre los pacientes con accidente cerebrovascular agudo indiferenciado.
Para poder determinar la necesidad o no de reducir la presión arterial de forma precoz, investigadores del Departamento de Neurología, Hospital Este de Shanghái, realizaron un estudio que publican en la revista The New England Journal of Medicine
En el estudio asignaron aleatoriamente a los pacientes con sospecha de accidente cerebrovascular agudo que causó un déficit motor y con presión arterial sistólica elevada (≥150 mm Hg), que fueron evaluados en la ambulancia dentro de las 2 horas posteriores al inicio de los síntomas, para recibir tratamiento inmediato para reducir la presión arterial sistólica (rango objetivo, 130 a 140 mm Hg) (grupo de intervención) o el manejo habitual de la presión arterial (grupo de atención habitual). El resultado primario de eficacia fue el estado funcional evaluado por la puntuación en la escala de Rankin modificada (intervalo, 0 [sin síntomas] a 6 [muerte]) a los 90 días después de la aleatorización. El resultado primario de seguridad fue cualquier evento adverso grave.
Reducción temprana de la presión arterial en el accidente cerebrovascular agudo
Reducir la presión arterial es la clave tanto en la prevención primaria de la enfermedad como en la secundaria para evitar su recidiva
Federico Pérez
17 de mayo 2024. 12:29 pm