Que los recortes son necesarios, pero si se cuida la forma de de aplicarlos; que éstos ya han afectado a la calidad asistencial del SNS; y que 'para salvaguardar el sistema sobran diagnósticos pero falta tratamiento y rehabilitación', son algunas de las ideas que Juan José Rodríguez Sendín, presidente de la Organización Médica Colegial (OMC), ha expuesto en su conferencia dentro del Foro Nueva Economía, después de ser presentado por el presidente de la Organización Nacional de Trasplantes, Rafael Matesanz.
'Esta crisis económica no debe llevarse por delante el servicio público que más cohesión aporta a la sociedad española', alegaba Sendín, que asimismo explicaba que el déficit financiero no debe convertirse en un déficit social, recordando que muy pocas familias podrían afrontar el coste de un tratamiento contra el cáncer, un trasplante, o de una enfermedad crónica sin un enorme quebranto económico.
Desde su propio diagnóstico, gran parte del problema radica en que pese al aumento en pasados años del gasto sanitario, 'una parte de este ha sido escasamente productivo, fruto de duplicaciones y de desaprovechamiento de economías de escala'. Para corregir esta cuestión serían necesarias dos cuestiones, la primera, una mayor evaluación y planificación, que es difícil cuando aún no se conocen datos tan básicos como el número de médicos o de especialistas en España. La segunda, un presupuesto finalista, puesto que según Rodríguez Sendín, 'los españoles admiten que se pida más para Sanidad y Educación, pero no para otras cosas, como televisiones', y por ello reclama 'presupuestos finalistas para que no haya trampa', y es que se pregunta así mismo a dónde ha ido todo lo que se ha ahorrado en Sanidad, y que no ha repercutido en el propio sistema.
Soluciones viables
Pedir a los profesionales sanitarios, que han visto recortado su salario en cuatro ocasiones los últimos dos años, que hagan un contrapeso ante los recortes para que la calidad no se vea afectada, es pedir demasiado, pero desde la OMC quieren seguir haciéndolo, porque 'los pacientes no tienen la culpa'. Pero el peso no puede recaer sólo en los médicos, pese a que el presidente de la OMC estima que tienen mucho que aportar racionalizando los recursos que gestionan día a día.
Precisamente, en racionalizar se centran gran parte de las propuestas de Juan José Rodríguez Sendín para la solución a la situación actual, que pasan por pedir coherencia a los políticos para alcanzar un Pacto de Estado que salvaguarde el SNS, y es que 'no debemos aceptar una Sanidad dual', puesto que aunque la colaboración público-privada ha dado sus frutos y mantiene un equilibrio aceptable, ese equilibrio debe ser fundamental, y todas estas experiencias habrá que evaluarlas.
Sus soluciones, por tanto, pasan por temas muy prácticos, como una evaluación de la cartera de servicios, que no sólo revise prestaciones, sino que aporte garantías y tiempos máximos en las listas de espera; la evaluación de las tecnologías, puesto que 'aquí no se ha evaluado casi nada'; cambiar los modelos de ejercicio profesional, hacia el enfermo crónico; y en general, detectar las bolsas de ineficiencia, pero para acotarlas y para prevenir que aumenten.
En cuestiones más comprometidas, como por ejemplo si se puede mantener o hay que redefinir las transferencias autonómicas, Rodríguez Sendín declara que 'dejemos lo bueno y corrijamos lo malo, no es incompatible la descentralización con hacer las cosas bien'. En cuanto al copago, su posición es firme, 'yo jamás cobraría', aunque si admite que son necesarias medidas para modular ciertos comportamientos de abuso en el sistema.