'En Navarra contamos con una buena Sanidad y así la valora la ciudadanía, pero no debemos caer en la autocomplacencia; hay que cambiar y mejorar las cosas porque no nos podemos conformar con más de los mismo. Estamos respondiendo a las necesidades de la población con una organización del siglo pasado cuando las demandas actuales son otras. Ahora nos enfrentamos a otros retos y nuestro objetivo estratégico, no cabe duda, que es el de mejorar el estado de salud de nuestra Comunidad. Para ello tenemos la obligación de renovar nuestra organización en profundidad si queremos que sea sostenible”, reconoce la consejera de Salud/Osasunbidea del Gobierno foral de Navarra, Santos Induráin, en una entrevista concedida a la revista EL MÉDICO.
Santos Induráin reconoce que en esta legislatura se centrarán en evitar ineficiencias y duplicidades y “quizás en reducir un poco de esa grasa organizacional que tenemos para hacer un poco más de músculo. Esto nos permitirá dedicar más recursos a lo que de verdad añade valor humano, a la investigación, etc”.
La consejera de Salud de Navarra, que ha trabajado durante 32 años en la Atención Primaria, conoce en primera persona los problemas que afectan a la misma, a la que considera como el eje del sistema sanitario. “Impulsar la AP supone reforzar la atención hospitalaria porque especialistas somos en los dos niveles. En esta área asistencial la apuesta es reforzar la cartera de servicios, la capacidad de resolución, así como redefinir perfiles y funciones, así como la integración de niveles, de funciones”, sostiene, sin olvidar el papel preponderante que darán a la Enfermería tanto en AP como en los hospitales.
“Para nosotros incentivar la Enfermería, que tiene un nivel altísimo, es una apuesta importante; sus atribuciones tienen que mejorar para que estén acordes con su nivel de competencias”, comenta Santos Induráin.
Entre los objetivos que se marca, destaca dotar a la Comunidad foral de una nueva Ley de Salud, con el mayor consenso posible, porque sabe que sin los profesionales sanitarios no se podrán llevar a cabo ninguna de las ambiciosas iniciativas que pretende llevar a cabo en los próximos años. Apuesta por una política y gestión de profesionales que sea proactiva, motivadora y “que haga que este proyecto sea ilusionante, tanto para mejorar la salud de la ciudadanía, como para dar respuesta a las necesidades de los profesionales. Hay que motivarlas no solo desde la organización de su trabajo, sino también en aspectos laborales, aunque sería un error asociar exclusivamente a los sanitarios navarros con demandas económicas”, reconoce.
La legislatura de la salud
En relación a la conexión de la AP con hospitales, piensa que no es tan fluida como debiera. “Tenemos que mejorarla sobre la base de equipos de trabajo conectados entre niveles y entre sí; hay que avanzar en la interconexión de los dos niveles asistenciales”, recalca Santos Induráin.
Consciente de que la Sanidad tiene un consenso social en Navarra, la consejera sostiene que “hará de esta legislatura, la legislatura de la salud”. Su pretensión es situar la salud en el lugar prioritario que la sociedad exige. En este sentido, desea que haya un consenso político para los cambios que se llevarán a cabo y que “no se haga demagogia con la Sanidad ni se utilice como arma arrojadiza. Si queremos emprender la transformación del sistema sanitario los acuerdos serán claves”.
Sobre el Consejo Interterritorial, explica que está resultando muy efectivo en la crisis del coronavirus. “Nos ha permitido revisar cómo funciona la coordinación interna de las Comunidades y también con el Ministerio de Sanidad; los criterios que llevamos a cabo están basados en la evidencia y recomendaciones técnicas. Se está haciendo un seguimiento en el que se tienen en cuenta a las sociedades científicas”, subraya.
“Para nosotros incentivar la Enfermería, que tiene un nivel altísimo, es una apuesta importante; sus atribuciones tienen que mejorar para que estén acordes con su nivel de competencias”, comenta Santos Induráin.
Entre los objetivos que se marca, destaca dotar a la Comunidad foral de una nueva Ley de Salud, con el mayor consenso posible, porque sabe que sin los profesionales sanitarios no se podrán llevar a cabo ninguna de las ambiciosas iniciativas que pretende llevar a cabo en los próximos años. Apuesta por una política y gestión de profesionales que sea proactiva, motivadora y “que haga que este proyecto sea ilusionante, tanto para mejorar la salud de la ciudadanía, como para dar respuesta a las necesidades de los profesionales. Hay que motivarlas no solo desde la organización de su trabajo, sino también en aspectos laborales, aunque sería un error asociar exclusivamente a los sanitarios navarros con demandas económicas”, reconoce.
La legislatura de la salud
En relación a la conexión de la AP con hospitales, piensa que no es tan fluida como debiera. “Tenemos que mejorarla sobre la base de equipos de trabajo conectados entre niveles y entre sí; hay que avanzar en la interconexión de los dos niveles asistenciales”, recalca Santos Induráin.
Consciente de que la Sanidad tiene un consenso social en Navarra, la consejera sostiene que “hará de esta legislatura, la legislatura de la salud”. Su pretensión es situar la salud en el lugar prioritario que la sociedad exige. En este sentido, desea que haya un consenso político para los cambios que se llevarán a cabo y que “no se haga demagogia con la Sanidad ni se utilice como arma arrojadiza. Si queremos emprender la transformación del sistema sanitario los acuerdos serán claves”.
Sobre el Consejo Interterritorial, explica que está resultando muy efectivo en la crisis del coronavirus. “Nos ha permitido revisar cómo funciona la coordinación interna de las Comunidades y también con el Ministerio de Sanidad; los criterios que llevamos a cabo están basados en la evidencia y recomendaciones técnicas. Se está haciendo un seguimiento en el que se tienen en cuenta a las sociedades científicas”, subraya.