Los protagonistas han sido médicos del Servicio de Cardiología del Hospital Gregorio Marañón, en colaboración con el Servicio de Anestesia y de Cirugía Cardiaca
12 de noviembre 2019. 2:10 pm
El servicio de Cardiología del Hospital Gregorio Marañón cuenta con las más avanzadas técnicas de imagen y una reputada experiencia en cateterismo. Su nuevo hito ha sido llevar a cabo por primera vez en España un doble implante valvular con catéter para el tratamiento de prótesis…
El servicio de Cardiología del Hospital Gregorio Marañón cuenta con las más avanzadas técnicas de imagen y una reputada experiencia en cateterismo. Su nuevo hito ha sido llevar a cabo por primera vez en España un doble implante valvular con catéter para el tratamiento de prótesis valvulares degeneradas, sin necesidad de realizar una cirugía convencional.
Se trata de una asistencia innovadora, en la que los especialistas han seguido las nuevas indicaciones terapéuticas de las agencias norteamericanas y europeas de medicamentos y productos sanitarios a un paciente en una situación grave, con sangrado bronquial, que requería una intervención rápida y que disminuyera las complicaciones para conseguir su estabilización lo antes posible.
Este paciente ya se había sometido hace años a una sustitución de las válvulas mitral y aórtica mediante cirugía a corazón abierto, recibiendo dos prótesis biológicas que, pasados los años, se encontraban degeneradas y tenían que ser cambiadas. Para evitar someterle a una segunda cirugía de alto riesgo, los cardiólogos del Gregorio Marañón, en colaboración con el Servicio de Anestesia y de Cirugía Cardiaca, planearon el recambio de las prótesis degeneradas por unas nuevas mediante un procedimiento percutáneo, es decir, exclusivamente con catéter.
Tras la intervención, los responsables de la misma han señalado que había resultado todo un éxito, ya que el paciente no ha presentado sangrado, no ha precisado la apertura del tórax ni circulación extracorpórea y ha tenido una “excelente evolución clínica”, además de presentar una “notable recuperación”.
En concreto, la operación la han llevado a cabo tres cardiólogos del Gregorio Marañón, el propio jefe del Servicio, Francisco Fernández-Avilés, junto a Jaime Elízaga y Enrique Gutiérrez, con la asistencia de técnicas avanzadas de imagen cardiaca a cargo de Javier Bermejo. La intervención ha durado menos de tres horas, frente a las cirugías convencionales, que han manifestado que son “mucho más largas y complejas”.