La pandemia actual por COVID-19, a la que se enfrenta el mundo, ha generado un reto sin precedentes para los sistemas de salud y para los profesionales médicos, ya que diversos reportes han identificado que uno de los aspectos más notorios es el riesgo aumentado de complicaciones y casos de mortalidad en personas con obesidad y otras enfermedades crónicas asociadas como hipertensión y diabetes.
Desde hace años, nuestro país ya vivía en medio de una sindemia, es decir, en medio de un efecto sinérgico entre dos epidemias debido a los altos niveles de prevalencia de estas dos enfermedades crónicas en nuestra población.
De acuerdo a datos de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2018 (Ensanut 2018), México aumentó en 2.2 millones el número de personas que viven con diabetes mellitus al pasar de 6.4 millones en 2012 a 8.6 millones en 2018, siendo más alto el porcentaje de mujeres con 11.4% de prevalencia, mientras que en hombres fue de 9.1 por ciento.
También hubo un repunte de 3.9% en casos de sobrepeso y obesidad en el mismo periodo del 2012 al 2018 en población mayor de 20 años, al pasar de 71.3% a 75.2% (39.1% sobrepeso y 36.1% de obesidad).
Sindemia de obesidad y diabetes en México
Lograr una pérdida de entre el 5% y 10% del peso corporal logra reducir de forma significativa el riesgo de vivir con diabetes tipo 2.
Rebeca Flores
17 de noviembre 2020. 12:23 pm