El 5 por ciento de los tumores hoy diagnosticados son de carácter hereditario, y se calcula que más del doble de este porcentaje, en toda la población, tendría esta predisposición genética a padecer cáncer. Es por ello, que la Sociedad Española de Oncología (SEOM) ha elaborado un documento de consenso con las tres sociedades de Atención Primaria, semFYC, SEMERGEN y SEMG, para que pueda servir de guía a los médicos de primaria a la hora de la detección, abordaje y derivación de un caso de cáncer hereditario.
La idea, según Juan Jesús Cruz, presidente de SEOM, es 'entre todos, detectar a las personas con esa predisposición', para poder hacer una detección precoz. El consenso se resume en un tríptico que será repartido entre los centros de Atención Primaria y que estará disponible en las páginas web de las distintas sociedades, para poder facilitar al médico de familia el abordaje ante este tipo de casos, y ofrecerle una herramienta que le facilite su formación. En realidad, el médico de familia, según afirmaban los diferentes representantes de las sociedades, es precisamente el que 'trata a las familias, no sólo a individuos', por lo que tiene una visión de conjunto, pero es que además es el primer profesional por el que pasa el paciente, y por tanto, este primer diagnóstico marcará mucho la evolución del caso del paciente.
Otra cuestión que quería dejar clara Juan Jesús Cruz, es el hecho de que se debe tener claro que 'no existe el cáncer hereditario, sino que existe la predisposición hereditaria al cáncer'. Es de decir, que el cáncer no es hereditario en sí, sino que lo que lo es la predisposición genética a ser más susceptible de padecer uno.
Qué hacer con un cáncer hereditario
Lo primero que marca esta guía de consenso son las características que pueden llevar a la sospecha de un cáncer hereditario, veáse, que la edad de aparición sea más temprana que en la población general; una alta incidencia de cáncer en la familia; la presencia del mismo tipo de cáncer en varios de los miembros; que el tumor se presente en órganos pares, o que existan varios cánceres primarios en el mismo individuo. Algunos de los tipos de cáncer hereditario son el cáncer de mama y /u ovario en la misma línea familiar, el cáncer de colon o recto diagnosticado antes de los 50 años, un diagnóstico clínico de poliposis adenomatosa familiar con más de 100 pólipos adenomatosos, o el diagnóstico de al menos dos cánceres gástricos del tipo histológico difuso.
Otra cuestión abordada es la del cómo, cuándo y a dónde deben derivarse los casos, dotando a los profesionales de una página web con un mapa detallado de las Unidades de Consejo Genético en Cáncer a las que poder derivar. El problema está en primer lugar en que antes de derivar hay que hacer un buen diagnóstico, y después, en que estas derivaciones no son siempre facilitadas dependiendo de la Comunidad Autónoma en la que el médico se encuentre. Hay que tener en cuenta, según apuntaba Carmen Guillén, coordinadora de la sección SEOM de cáncer hereditario, que 'el estudio genético no puede ofrecerse a todo el mundo de manera indiscriminada, sino basada en criterios de sospecha', al igual que el hecho de ofrecer consejo genético no se traduce en realizar el test genético, decisión que dependerá del especialista, y del paciente en último término.
En resumen, se trata de un avance que comienza por entender 'lo imprescindible de la colaboración entre niveles asistenciales' según Patrocinio Verde de semFYC, y que evidencia lo 'coste efectiva que puede ser la Medicina Preventiva'.