En Europa cada año se registran 3,9 millones de muertes por enfermedades relacionadas con el corazón, es decir, 10.000 fallecimientos al día. Su prevalencia es alta, ya que en 2020 más de 60 millones de personas vivían con enfermedades cardiovasculares en la Unión Europea y se diagnosticaron casi 13 millones de casos nuevos.
Pero, a medida que la población europea siga envejeciendo -y se estima que en 2040 habrá 155 millones de europeos mayores de 65 años-, se prevé que la incidencia de las enfermedades cardiovasculares aumentará considerablemente.
En concreto en España, según los últimos datos disponibles del Instituto Nacional de Estadística (INE), casi 120.000 personas perdieron la vida por enfermedades del sistema circulatorio en 2020, constituyendo la primera causa de muerte por delante del cáncer.
A pesar de los esfuerzos que se realizan en prevención, sigue quedando mucho camino por recorrer, como pone de manifiesto la encuesta que Daiichi Sankyo acaba de realizar a más de 6.000 personas de cinco países europeos (Reino Unido, Italia, Alemania, España y Países Bajos).
En el caso concreto del colesterol alto o dislipemia (especialmente los niveles plasmáticos elevados de LDL, que es uno de los principales factores de riesgo de cardiopatía isquémica e ictus isquémico), un 74 % de los encuestados españoles lo reconocen como uno de los factores de riesgo más importantes.
Y lo hacen por delante de la hipertensión, que es preocupante para un 63 % de los encuestados o entrevistados. “De esta encuesta deducimos que la población está concienciada de la importancia de controlar el colesterol, un dato que se contrapone con el control real que existe', explica el doctor Muñoz.
Impacto
En la misma se evalúa el grado de conciencia y comprensión de la sociedad con respecto a las enfermedades cardiovasculares y su impacto, en el marco de la campaña ‘We Care for Every Heartbeat’. De media, solo el 24% de los encuestados conoce que la enfermedad cardiovascular es la principal causa de muerte a nivel europeo. Pero, entre los 1.213 hombres y mujeres españoles que han participado, esta cifra desciende hasta el 19%, siendo España el país menos consciente del potencial impacto letal de las patologías del corazón. “Esto pone de manifiesto que aún queda mucho trabajo por realizar en términos de educación sanitaria y prevención. Es crucial seguir informando a la población, empoderar a las personas para que tomen un rol mucho más activo en la prevención de estas dolencias', afirma Jorge Muñoz Robles, director médico de Daiichi Sankyo en España. 'Tienen que ser capaces de reconocer los síntomas de alarma ante los que deben acudir al médico, y siendo conscientes de que hay factores de riesgo que pueden evitar modificando pautas de alimentación, ejercicio y estilo de vida”, añade.Colesterol
Dos de los principales factores de riesgo cardiovascular modificables son el colesterol elevado (en concreto, el C-LDL) y la hipertensión. Sin embargo, menos de la mitad de los europeos participantes en la encuesta conocen sus niveles de colesterol y presión sanguínea. En este punto, los encuestados españoles son los más conocedores de sus niveles (un 60,3 % afirma saberlo) y los de Reino Unido los que peor resultado presentan, con un 28,9 % de respuestas positivas.