Se celebra el Día de la Salud Sexual, recordando que las relaciones sexuales reducen el estrés y el dolor, facilita el sueño, combate la depresión, fortalece los vasos sanguíneos y estimula el sistema inmune
4 de septiembre 2018. 1:45 pm
Gracias a la mediación de la Asociación Mundial para la Salud Sexual ,el 4 de septiembre se celebra el Día de la Salud Sexual, que busca sensibilizar y concienciar sobre la importancia que tiene el ámbito sexual en la vida cotidiana. En este sentido, expertos…
Gracias a la mediación de la Asociación Mundial para la Salud Sexual ,el 4 de septiembre se celebra el Día de la Salud Sexual, que busca sensibilizar y concienciar sobre la importancia que tiene el ámbito sexual en la vida cotidiana.
En este sentido, expertos de Boston Medical Group han querido recordar que tener una vida sexual plena y activa lleva, irremediablemente, a ser más feliz gracias a una larga lista de consecuencias fisiológicas y
psíquicas. Así, el sexo aumenta los niveles de testosterona, potenciando de esta manera la masa muscular, la energía y mejora la respuesta cognitiva. No solo eso. Su práctica reduce el estrés y el dolor, facilita el sueño, combate la depresión, fortalece los vasos sanguíneos y estimula el sistema inmune.
Otros de los
beneficios a tener en cuenta son que durante el orgasmo, se liberan endorfinas y serotonina, unas hormonas que provocan en la mente del hombre la sensación de bienestar y optimismo, al tiempo que supone un ‘chute’ para aumentar la autoestima.
El tabú de las dificultades sexuales
Pese a la importancia real de la sexualidad en la salud física y emocional, aún existe un importante tabú en torno a las dificultades sexuales. Tanto es así, que según datos aportados por Boston Medical Group, solo un tercio de las personas afectadas buscan el apoyo de especialistas.
Esta cifra supone un riesgo en la salud de muchas personas, porque si bien muchas de las cuestiones relacionadas con la sexualidad, tienen un origen psicológico, y por ello la primera opción es consultar a un experto en Sexología, otras cuestiones también tienen que ver con problemas de tipo fisiológico. Así, estos problemas sexuales pueden esconder enfermedades más graves y que pueden llegar a ser irreversibles. Como ejemplo, cabe mencionar que la disfunción eréctil es un factor de riesgo cardiovascular al ser un importante predictor de enfermedad coronaria, sobre todo en menores de 60 años.
Aportando cifras, desde Boston Medical Group señalan que este 2018 se han atendido un 36 por ciento más de pacientes con tratamiento de ondas de choque para la disfunción eréctil y la enfermedad de Peyronie (curvatura del pene) que el año anterior. A este respecto, desde esta clínica concluyen que “afortunadamente a día de hoy se puede tener una óptima salud sexual. Los profesionales estamos preparados para ayudar a las personas a que se enfrenten a sus miedos e insatisfacciones en la cama”.