Los MIR son imprescindibles en cualquier sistema sanitario que se precie. En la Comunidad foral de Navarra se hallan formándose un total de 396 a pleno rendimiento haciendo en ocasiones funciones que corresponden a médicos con plaza fija. A pesar de ser profesionales altamente cualificados están mal pagados y en los últimos años son el colectivo a los que más recortes se les ha aplicado, según denuncian desde el Sindicato Médico de Navarra (SMN).
Desde la central médica navarra critican con dureza que las retribuciones de los MIR se sitúan por debajo de lo que debiera corresponder a su nivel de alta cualificación tras seis años de estudios universitarios. A pesar de ello, del bajo nivel retributivo -en Navarra el sueldo base de los residentes es equiparable al percibido por el nivel D de la Administración (auxiliares, por ejemplo)- se les han aplicado recortes de nivel A', dicen desde el Sindicato Médico, según los datos de su estudio sobre retribuciones de los facultativos del Sistema Nacional de Salud. Así pues, la pérdida de poder adquisitivo de los MIR ha sido superior al de otros colectivos con similares retribuciones.
Un gran porcentaje del suelo que perciben se debe a las guardias que realizan, de media supera el 40 por ciento. Para lograr una retribución de 28.858 euros brutos anuales en 2012, un MIR debió realizar, además de toda su jornada ordinaria, 924 horas presenciales más, parte de ellas en fines de semana y festivos, incluidas las Navidades, es decir, realizaron la jornada completa del personal de mañanas más el 63 por ciento de la jornada del personal de urgencias.
Diferencia con otras CC.AA.
Es este componente de retribuciones extraordinarias el que finalmente marca la diferencia entre las comunidades autónomas. Navarra, con cerca de un 14 por ciento, es la tercera Comunidad en cuanto a los tijeretazos en este concepto. A pesar de estos recortes, gracias a las retribuciones de este componente de jornada extraordinaria, Navarra sigue siendo una de las CC.AA. que mejor retribuye a sus residentes, no obstante, al realizar comparaciones entre comunidades hay que tener en cuenta también factores socioeconómicos, como el diferente coste de la vida.
Para entender cómo se configura la nómina de un MIR hay que aclarar que los residentes, dentro de la jornada ordinaria, no perciben otras retribuciones que sí aparecen en el caso de los facultativos especialistas o en los de Atención Primaria como pueden ser productividad variable, antigüedad, carrera profesional, etc. Esto quiere decir que las retribuciones de los residentes se limitan a las fijas, diferentes según las autonomías, y las variables, es decir, las guardias.
En cuanto a las fijas, el sueldo base es el mismo para todos los niveles de residencia, pero no ocurre lo mismo con el resto de complementos, que, en general, van aumentando conforme aumenta el año de residencia.
Las retribuciones con respecto al sueldo base, extras y complemento de formación presentan muy escasas variaciones según las autonomías. Las mayores diferencias entre comunidades aparecen cuando se cobran otros tipos de complemento como los englobados en 'otros complementos' o los correspondientes a residencia.
En Navarra, la retribución fija de un residente de segundo año pasó de 17.560 euros en 2010 a 15.626 euros en 2012, es decir 1.934 euros menos en dos años, lo que supone un 11 por ciento de caída. Pero, la pérdida ocasionada por los recortes, tanto en valor absoluto como en porcentaje, no es igual en todas las autonomías. El resultado final depende de varios factores, entre ellos las retribuciones iniciales de las que se parte, el porcentaje de recorte que se ha ido aplicando en los distintos periodos, la forma de aplicar el recorte -las CC.AA. que en 2010 repercutieron parte del rebajo en la paga extra, al eliminar dicha paga en diciembre de 2010 sufrieron una pérdida menor- o los conceptos sobre los que se aplican los recortes.
Retribuciones variables
Las retribuciones variables son las que precisan de una dedicación en tiempo que queda fuera de la jornada ordinaria. En el caso de los residentes se limitan al precio de la hora de guardia, que se incrementa conforme aumenta el año de residencia. Así como en las retribuciones fijas existía gran similitud entre las distintas autonomías, en el precio de la hora de guardia se aprecia una gran dispersión de valores, no solo en la hora de guardia de los días laborables sino también en el pago de manera diferente de sábados, domingos y festivos y días especiales. No todas los servicios autonómicos de salud diferencian el pago de la hora de guardia los días laborables y los festivos, aunque son una minoría las que no lo hacen y Navarra es una de ellas, que también se encuentra entre las pocas que no priman económicamente la realización de guardias en los llamados 'días especiales'.
Del estudio llevado a cabo por el SMN se desprende que los recortes son diferentes según las CC.AA. En este sentido indican que los porcentajes aplicados son en general muy similares, pero dado los diferentes precios de la hora de guardia de la que se partía, los precios finales también son muy dispares.
En la Comunidad foral de Navarra se bajó el precio de 20 euros por hora a 17 euros, un 15 por ciento menos, en el caso de residentes de segundo año, la tercera comunidad en la que más bajó. Por otro lado, cada residente puede realizar un número de guardias diferente, de manera que el impacto final sobre sus retribuciones resulta difícil de calcular aunque la media, para todos los años y todas las CC.AA, del ingreso por guardias con respecto a la totalidad de las retribuciones brutas percibidas es del 42,69 por ciento.
Los residentes navarros han sufrido un importante recorte global debido al gran peso de las guardias en cuya bajada, al igual que ocurre para el resto de facultativos, Navarra se encuentra en los puestos de cabeza -la segunda en cuanto al valor en euros y la tercera en los porcentajes-. Así, el recorte global supone 4.489 euros, un porcentaje acumulado del 13,1 por ciento de 2010 a 2012.