La salud nutricional y metabólica de la mujer alrededor del
embarazo tiene implicaciones en el resultado de la gestación, el crecimiento fetal y la futura salud del recién nacido. Partiendo de esta premisa, un estudio ha demostrado que la suplementación nutricional con probióticos, micronutrientes y mioinositol, antes de la concepción y durante la gestación, reduce el riesgo de parto prematuro.
El objetivo del estudio era valorar si los suplementos nutricionales influían en los niveles de azúcar en sangre de la madre o en el peso de los recién nacidos. Aunque no se demostró esa asociación, sí se determinó una disminución del riesgo de parto pretérmino, en particular en los casos asociados a la ruptura de membranas antes del alumbramiento.
La investigación, denominada NiPPeR y publicada en la revista
Diabetes Care, fue realizada por investigadores internacionales de entidades que forman parte del Consorcio Mundial de Investigación EpiGen.
Mujeres de tres países
Para el estudio, aleatorio, multicéntrico y doble ciego, se reclutó a 1.729 mujeres entre 18 y 38 años que habían planeado tener familia durante los siguientes seis meses. Las participantes eran de Singapur, Nueva Zelanda y Reino Unido. Y del total, resultaron 725 embarazos establecidos y 585 bebés nacidos.
“Una de las fortalezas del estudio es la diversidad de sus participantes, ya que son mujeres de múltiples etnias de la población general de tres países, lo que significa que los resultados tienen una gran relevancia para todas las mujeres que planifican un embarazo”, ha destacado el profesor Shiao-Yng Chan, de la Universidad Nacional de Singapur y uno de los investigadores principales del estudio.
“Al ser, además, un estudio doble ciego se minimiza el sesgo”, ha añadido.
Probióticos y micronutrientes y mioinositol
Las mujeres recibieron al azar, bien un compuesto de polvo en sobres con la mezcla de la intervención, bien únicamente con los ingredientes comunes en ambas formulaciones. Esas sustancias comunes eran dosis diarias de 400 μg de ácido fólico, 12 miligramos de hierro, 150 miligramos de calcio, 150 μg de yodo y 720 μg β-caroteno.
En cuanto a la mezcla de la intervención, además de los elementos mencionados, contenía: 4 gramos de mioinositol, 10 μg de vitamina D, 1,8 miligramos de riboflavina, 2,6 miligramos de vitamina B6, 5.2 μg de vitamina B12, 10 miligramos de zinc y los probióticos:
Lactobacillus rhamnosus y
Bifidobacterium animalisespecie lactis.
Reducción de hemorragias
Los resultados, a las 28 semanas de la gestación, no mostraron efectos significativos sobre la incidencia de la diabetes gestaciones. Sin embargo, redujo el riesgo de parto prematuro, así como una reducción de la incidencia de hemorragias tras el parto. Los datos confirman los resultados de otros estudios en relación a la influencia de mioinositol en la reducción del parto prematuro.
La tasa de prematuridad está entre un 5% y un 18% y constituye un problema de salud pública que sigue aumentando. Según los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año nacen 15 millones de bebés entre las 28 y las 37 semanas de gestación. De estos, un millón de niños no mueren en el momento del parto y otro millón sufre algún tipo de discapacidad.