La implementación de tecnologías de gestión en los hospitales ayuda a reducir su gasto de gestión anual hasta en un 40 por ciento, gracias a la automatización de parte de las tareas administrativas y de gestión de los centros sanitarios. La optimización de los tiempos del personal, junto con la eliminación de pérdidas de material por errores humanos y caducidades, y la disminución de stock son las claves para conseguir este ahorro, que se traslada además al conjunto del sistema sanitario. Así lo establece una información sobre el ahorro que supone la implementación de tecnologías de gestión para los hospitales y el sistema sanitario español elaborada por Palex Medical
Además de asumir labores de gestión, los sistemas tecnológicos también pueden actuar como soporte en las tareas sanitarias diarias del personal, liberando hasta un 50 por ciento de su tiempo de tareas no asistenciales o de poco valor añadido. Esta reducción de tiempo supone, además de un ahorro, permitiendo al personal sanitario centrarse en la atención al paciente.
Según los datos de Palex Medical sobre los beneficios respecto, por ejemplo, a la gestión de fungibles de alto valor, la automatización de los procesos de manipulación supone un ahorro anual de entre un 20 y un 40 por ciento, gracias a la reducción de merma del material y al control de caducidades.
Además, actualmente es habitual que haya un exceso de stock de productos en los hospitales para asegurar su disponibilidad en el momento que sean necesarios. Tecnologías como la RFID (identificación por radiofrecuencia) controlan todos los stocks, avisando, por ejemplo, cuando el producto está a punto de caducar o enviando órdenes de reposición automáticas cuando se esté agotando. De esta forma se alcanza un ahorro del 40 por ciento del stock.
La implicación del personal sanitario en las tareas administrativas y logísticas resta mucho tiempo a la atención al paciente. Mediante la automatización de dichas tareas se reduce entre un 60 y un 80 por ciento el tiempo del personal sanitario en dichas tareas lo que supone una mayor dedicación al paciente.
Además, los sistemas automáticos aumentan también la seguridad del paciente minimizando los errores humanos. De este modo se puede garantizar la seguridad en los tratamientos a los que se somete el paciente en el hospital, así como el estado óptimo de los productos y soluciones utilizados.
Por otra parte, disponer de datos estadísticos de trazabilidad y utilización de los productos cruzándolos con otras variables, como por ejemplo la época del año en la que se usan o durante alertas hospitalarias, ayuda a generar una mejor estrategia de optimización de inventarios. Estos datos también permiten tener un mayor control del coste por paciente, intervención o proceso.