Una nueva investigación de la Universidad de Rochester (Estados Unidos) ha mostrado que los teléfonos inteligentes y ‘smartwatches’ son capaces de captar características clave de la enfermedad de Parkinson en fase temprana y sin tratamiento. Estas tecnologías podrían proporcionar formas más objetivas y continuas de…
Una nueva investigación de la Universidad de Rochester (Estados Unidos) ha mostrado que los teléfonos inteligentes y 'smartwatches' son capaces de captar características clave de la enfermedad de Parkinson en fase temprana y sin tratamiento.
Estas tecnologías podrían proporcionar formas más objetivas y continuas de medir la enfermedad y llevar nuevos tratamientos al mercado más rápidamente, en particular para los pacientes en las primeras etapas de la enfermedad.
'Esta investigación muestra que la tecnología fácilmente accesible y ubicua tiene el potencial de detectar y medir objetivamente la severidad y potencialmente la progresión de importantes síntomas de la enfermedad de Parkinson', ha señalado el neurólogo Jamie Adams, primer autor del estudio, publicado en la revista científica 'npj Parkinson's Disease'.
Aunque el Parkinson es la enfermedad cerebral de más rápido crecimiento en el mundo, la mayoría de los medicamentos utilizados para tratarla fueron desarrollados en el siglo XX.
La complejidad de la enfermedad y la limitación de las medidas actuales han sido barreras para las nuevas terapias. La aparición y gravedad de los síntomas, como rigidez en brazos y piernas, dificultad para moverse y caminar y temblores, y la progresión de la enfermedad pueden variar significativamente de un paciente a otro.
Además, las herramientas utilizadas tradicionalmente para hacer un seguimiento de la enfermedad son subjetivas y episódicas. Por ejemplo, sólo se recogen durante las visitas al hospital, lo que limita la comprensión de cómo el Parkinson afecta a la vida cotidiana de las personas.