Las mujeres a las que se administra terapia hormonal sustitutiva (HRT) compuesta sólo de estrógenos parecen menos propensas a desarrollar cáncer de mama a largo plazo. Así lo ha demostrado una investigación del Fred Hutchinson Cancer Research Center, en Seattle, Estados Unidos, publicada online en The Lancet Oncology.
El estudio, basado en la observación de 7.500 mujeres de la Iniciativa de Salud de la MUJER (WHI) que tomaron estrógenos durante seis años y después suspendieron el tratamiento, descubrió que ellas eran un 20 por ciento menos propensas a desarrollar cáncer de mama y tenían menos probabilidades de morir de esta enfermedad que aquellas que nunca habían tomado HRT, cinco años después del tratamiento.
Para el director del estudio, Garnet Anderson, del Fred Hutchinson Cancer Research Center, estos últimos resultados proporcionarán tranquilidad sobre la seguridad de los estrógenos en su uso durante unos cinco años en mujeres con histerectomía que busquen aliviarse de los síntomas postmenopaúsicos.
En 1993, el ensayo WHI con estrógenos buscó investigar los efectos de los estrógenos equinos conjugados en la enfermedad crónica. Cerca de 11.000 mujeres postmenopaúsicas entre los 50 y los 79 años sometidas antes a una histerectomía recibieron estrógenos o placebo durante un periodo de siete años. El ensayo frenó en 2004, un año antes de lo planeado, tras detectarse un mayor riesgo de ictus y trombos.
En este nuevo análisis, el equipo de Anderson registró los efectos generales de los estrógenos sobre la incidencia del cáncer de mama y su mortalidad, incluyendo el seguimiento de 7.645 mujere, el 78 por ciento de las supervivientes que fueron seguidas desde marzo de 2005 hasta agosto de 2009, unos 4,7 años después de dejar de tomar la terapia de estrógenos.
Descubrieron un 23 por ciento de reducción en la incidencia de cáncer de mama invasivo, en comparación con placebo, 151 casos, 0,27 por ciento anual frente a 199 casos, 0,35 por ciento al año, durante un periodo de 12 años de seguimiento, mientras que las mujeres del grupo de estrógenos que desarrollaron cáncer de mama presentaban una reducción del 63 por ciento en las muertes por esta enfermedad, seis fallecimientos, 0,009 por ciento al año frente 16 muertes, 0.024 por ciento anual, en comparación con el grupo de placebo.
