En el marco del
II Foro de Gestión y Servicios de Farmacia Hospitalaria de la Fundación Española de Directivos de la Salud (Fundación
SEDISA), se ha confirmado que los medicamentos de terapia personalizada o dirigida se presentan como uno de los principales desencadenantes para el desarrollo de la medicina predictiva. Este encuentro reunió a un centenar de farmacéuticos de hospital y directivos de la Salud de toda España.
En palabras de Carlos Crespo Diz, jefe del Servicio de Farmacia Hospitalaria del Hospital Universitario de Pontevedra, “los programas puestos en marcha en el Sistema Nacional de Salud (SNS) relacionados con la Innovación Terapéutica Transformacional engloban la
Estrategia Española de Medicina Personalizada, que comprende diversas acciones concretas articuladas en determinados planes, como el Plan de Terapias Avanzadas y Personalizadas y el Plan de Medicina Predictiva, así como el Plan Estratégico de Infraestructura de Medicina de Precisión asociada a la Ciencia y a la Tecnología
(IMPaCT) y el Plan para el Abordaje de las Terapias Avanzadas en el SNS. Medicamentos CAR”.
En la actualidad, los medicamentos de terapia personalizada o dirigida se presentan como uno de los principales desencadenantes para el desarrollo de la medicina predictiva, “que en la práctica clínica presenta un valor transcendental para la
correcta selección de las herramientas terapéuticas disponibles para el tratamiento de patologías de elevado impacto sanitario y social, como por ejemplo todas aquellas relacionadas con el cáncer, las enfermedades raras y las enfermedades crónicas de componente inmunológico”, explicó Carlos Crespo Diz.
Esfuerzo de los agentes implicados
Pero uno de los retos que supone este tipo de terapias es, sin duda, la
sostenibilidad. En este sentido, Carlos Crespo Diz señaló que “el elevado coste de los tratamientos de Terapias Avanzadas y Personalizadas pueden llegar a distorsionar la sostenibilidad del SNS. Este hecho hace necesario que todos los agentes implicados aúnen esfuerzos y estrategias para que la aplicación de los tratamientos de terapias personalizadas, celulares, génicas y tisulares, se consoliden dentro de la cartera básica y común de la prestación farmacéutica del SNS”.
Junto a la sostenibilidad, el gran reto para la gestión de este tipo de terapias es el acceso a ellas por parte de los pacientes. Para ello, los directivos de la Salud de los hospitales están desarrollando modelos de acceso innovadores, en los que
el rol de la Farmacia Hospitalaria es clave. Según Sonia García de San José, directora gerente del Hospital General Universitario Gregorio Marañón de Madrid, “para ello, es clave la transformación y el cambio en la gobernanza de las Organizaciones Sanitarias”.
A este respecto, de San José explicó la implicación de las 5 C: “Se deben compartir casos de éxito y los resultados que se obtienen; para cambiar el modelo de transformación del hospital se debe contar con el compromiso y basar en él los objetivos y estrategia; la confianza del trabajo en equipo y generar clima de confianza en la organización; la compañía, en el sentido de contar con la multidisciplinariedad para ayudar a sostener y madurar los proyectos restándole a alcanzar nuevos retos como certificaciones”.
Adecuada selección de paciente
Tal y como se puso de manifiesto durante este II Foro de la Fundación SEDISA, en dichos modelos de acceso innovadores se debe contar con la
participación de todos los implicados -gerencia, servicio clínico, farmacia hospitalaria, equipo de enfermería y pacientes- realizando de forma adecuada la selección del paciente, teniendo en cuenta la bioseguridad, bajo una coordinación multidisciplinar y con otros hospitales y llevando a cabo un registro inicial y de seguimiento, con valoración de resultados, así como formación y definición de circuitos.
Respecto a la participación de los pacientes en la Gestión, Manuel Arellano, vicepresidente de la Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP), hizo hincapié en la importancia de la “
corresponsabilidad y educación de los pacientes, para aportar una riqueza con una perspectiva diferente y complementaria como receptor del tratamiento en relación a cuáles son sus necesidades en la atención centrada en la persona. En definitiva, supone una gran aportación de valor de cara a las decisiones”.
