De acuerdo con el Manual de MSD para profesionales de la salud, el trastorno bipolar es una enfermedad cíclica que implica episodios de manía con depresión o sin ella.
Afecta a la capacidad de desempeño laboral y de interacción social; el riesgo de suicidio es alto.
Estados de bipolaridad
Los estados maníacos leves (hipomanía) pueden ser adaptativos, porque generan energía, creatividad, confianza y desempeño social por encima de lo normal. La duración y la frecuencia de los ciclos varían entre los pacientes, algunos tienen pocos episodios durante toda la vida, mientras que otros tienen ≥ 4 episodios/año. Pocos pacientes alternan entre la manía y la depresión durante cada ciclo; en la mayoría de los ciclos predomina una u otra.Diagnóstico y tratamiento
El diagnóstico se basa en criterios clínicos. El uso estimulante y trastornos físicos como hipertiroidismo o feocromocitoma deben descartarse mediante pruebas. El tratamiento depende de las manifestaciones y su gravedad, pero normalmente implica estabilizadores del estado de ánimo. Por ejemplo, litio, valproato, carbamazepina, lamotrigina y/o antipsicóticos de segunda generación como aripiprazol, lurasidona, olanzapina, quetiapina, risperidona, ziprasidona, cariprazina. El tratamiento del trastorno bipolar habitualmente tiene 3 fases:- Aguda para estabilizar y controlar las manifestaciones iniciales, a veces graves.
- Continuada para alcanzar una remisión completa.
- De mantenimiento o de prevención para mantener a los pacientes en remisión.