Actualmente, existen diferentes operaciones quirúrgicas de garganta. La mayoría de ellas están destinadas a paliar los problemas de la voz, como son los pólipos o nódulos. Sin embargo, no es tan conocido que existen intervenciones para cambiar su tono. Especialmente para
masculinizar o feminizar la voz. Estas intervenciones tienen como objetivo contribuir al reconocimiento de la identidad de los pacientes y la mejora de su autoestima.
En el caso de feminizar la voz, lo habitual es realizar una
glotoplastia. En el caso de querer masculinizar el tono, lo habitual es optar por la
tiroplastia tipo III. Se trata de cirugías poco comunes y por ello las realiza
un número muy escaso de fonocirujanos. Se calcula que solo siete en el mundo son expertos en este tipo de intervenciones y uno de ellos es español.
Se trata de
Juan Carlos Casado, un especialista otorrinolaringólogo que lleva más de 15 años realizando esta intervención en Marbella. En concreto, ha operado satisfactoriamente a más de 100 pacientes en el ámbito privado.
A este respecto, y debido a su gran complejidad técnica, Casado ha
patentado a nivel mundial un utensilio quirúrgico llamado IVCS (International Vocal Fold Suture). El objetivo es colocar los puntos de sutura de forma más efectiva y con menor tiempo quirúrgico.
Técnicas para feminizar la voz
La glotoplastia es una operación técnicamente complicada para feminizar la voz. Sin embargo, no conlleva riesgos para la salud de las personas que recurren a ella, principalmente mujeres. Está destinado a personas transgénero mayores de edad que quieren reducir el tono de su voz. Con una duración de 90 minutos, se basa en
realizar una reducción de la longitud de las cuerdas vocales. Para ello se realiza una sutura en la parte anterior de las mismas. No conlleva incisiones, ya que
se realiza por vía endoscópica a través de la boca. Por este motivo, no deja cicatrices externas y solo produce leves molestias.
Los requisitos para poder ser sometido a este tipo de intervención para feminizar la voz requieren ser mayor de edad y no tener más de 50. También es necesario tener una frecuencia vocal que oscile entre los 120 y 145 hercios en el tono vocal.