Los contagios a causa del COVID-19 revelan que México está entrando en una fase de endemicidad, es decir, que pasa de ser un brote nuevo a una enfermedad con la que tenemos que aprender a vivir, aseguró el Dr. Miguel Betancourt Cravioto, médico de la Universidad La Salle y pediatra del
Hospital Infantil de México.
En entrevista con
El Médico Interactivo, el especialista comentó que el COVID-19 sigue siendo un tema de relevancia en el sector salud mexicano, ya que a pesar de que hace un año se declaró el fin de la emergencia sanitaria, aún se reportan contagios y nuevas variantes que hacen de esta enfermedad algo persistente.
“El COVID-19 debemos de entenderlo como una enfermedad que llegó para quedarse y para la cual tenemos que estar prevenidos y preparados. No hemos, científicamente llegado a la conclusión de que vaya a ser una enfermedad estacional como lo es la influenza; hoy estamos viendo contagios a lo largo de todo el año”, afirmó.
Temporada invernal, un reto para la inmunización
El médico explicó que actualmente el incremento en los casos de COVID-19 se debe a los comportamientos de las personas durante la temporada invernal.
“Pasa que estamos con las ventanas cerradas, nos juntamos en las casas evitando el frío y esos comportamientos son los que facilitan el contagio entre personas de enfermedades respiratorias como el COVID-19”, afirmó.
Ante ello, dejó claro que México está entrando en la fase de endemicidad, lo que representa un reto para la población, el cual es aprender a sobrevivir con este padecimiento y mantener las medidas de higiene y sana distancia.
“Hay que seguir las mismas medidas: el uso del cubrebocas, lavar las manos constantemente
. La higiene es importante y la vacunación previene las formas graves y lo potencialmente mortal de la enfermedad”, dijo.
Variantes de COVID-19
Si bien la vacunación siempre es relevante con una enfermedad como el COVID-19, hay que tomar en cuenta que el estudio, el conocimiento de la enfermedad y la disposición que se tenga para combatir el virus, es crucial para la supervivencia.
Por ejemplo, se sabe que el virus cambia año con año, es decir, que las vacunas de la primera etapa de vacunación seguramente no servirían para las de la tercera dosis de vacunas.
“En el caso de COVID, las vacunas que nos pusimos en la primera etapa eran vacunas que se diseñaron precisamente contra las variantes originales; hoy prácticamente estas variantes ya no circulan, hoy estamos viendo otras derivadas casi en su mayoría derivadas de ómicron y son precisamente contra las que nos tenemos que estar protegiendo”, explicó.
Esquemas de vacunación
En el tema de las vacunas, el experto relató que en caso de no haber recibido ninguna vacuna anteriormente, se puede colocar un esquema primario de protección, el cual se obtiene a través de las vacunas que se encuentran disponibles en el mercado.
“Cada vacuna tiene su esquema primario y su esquema de refuerzo. En general, el esquema primario es de dos dosis con intervalo de uno o dos meses entre dosis para las personas que nunca han recibido dosis de la vacuna. Para quienes ya completaron el esquema primario con cualquier vacuna, se recomienda una dosis de refuerzo con una vacuna actualizada al menos seis meses después de la última dosis”, refirió.
Asimismo, recordó que los menos protegidos son los menores de 17 años con menos del 5% de cobertura.
Actualmente están circulando las cepas derivadas de Omicron como BA.5.1, BE.1, BE.2 y BF.1; todas tienen mas o menos el mismo patrón de contagiosidad y gravedad.