Los síntomas son de fácil reconocimiento, la ausencia o dificultad para lograr una erección y completar una relación sexual por tres meses o más
30 de octubre 2018. 1:27 pm
En el mundo se estima que la disfunción eréctil afecta a los varones mayores de 40 años, en un 55 por ciento en forma leve, al 35 por ciento de manera moderada y al 10 por ciento en forma severa, sin embargo, en México se desconocen cifras…
En el mundo se estima que la disfunción eréctil afecta a los varones mayores de 40 años, en un 55 por ciento en forma leve, al 35 por ciento de manera moderada y al 10 por ciento en forma severa, sin embargo, en México se desconocen cifras exactas de este padecimiento.
La principal afectación suele ser la autoestima, un gran porcentaje de los pacientes se resiste a reconocerlo y a recibir tratamiento médico, lo que genera problemas en la relación de pareja o tensiones en el núcleo familiar.
De manera estricta, la disfunción eréctil no es una enfermedad sino una patología ya que no representa un riesgo o peligro en la salud del varón, lo que realmente se trata en Esta consulta es la sensación de ansiedad que afecta física y emocionalmente a los hombres que la padecen.
Los síntomas son de fácil reconocimiento, la ausencia o dificultad para lograr una erección y completar una relación sexual por tres meses o más.
El diagnóstico consiste en un examen físico en testículos, pene, recto, sistema nervioso y flujo sanguíneo, a partir de los datos que el historial clínico arroje, se podrán recetar tratamientos que van desde los fármacos hasta psicoterapia y terapia conductual cuando se presenten casos de estrés, ansiedad, culpa o depresión.
Es necesario contemplar factores de aparición como la medicación por enfermedades como antihipertensivos, depresión y otras enfermedades del corazón. Es importante descartar problemas como es la prostatitis.
Entre los factores de riesgo modificables se encuentran el consumo de sustancias ilegales, el consumo de alcohol, tabaco y falta de actividad física. Los especialistas recomiendan visitar al especialista una vez al año para descartar otras complicaciones infecciones o cáncer.