La hepatitis D es la hepatitis que causa mayor progresión de enfermedad en el hígado, derivando en cirrosis o cáncer de hígado, y suele afectar a personas jóvenes. En el caso del diagnóstico de la hepatitis D, se debe
buscar entre los pacientes que ya padecen hepatitis B. Pese a ello, como a menudo son enfermedades asintomáticas, “es necesario hacer un cribado proactivo para detectarlos”.
Así se puso de manifiesto la ponencia “Cribado y tratamiento de la hepatitis delta en España”, dentro de la Mesa de hepatitis virales que tuvo lugar durante la celebración del
83º Congreso de la SEPD, celebrado del 13 al 15 de junio en Valencia, de la mano de Sabela Lens, experta de la Sociedad Española de Patología Digestiva (
SEPD) y médico especialista en hepatología del Hospital Clinic de Barcelona.
Diagnóstico de la hepatitis D
En este sentido, actualmente el diagnostico de la hepatitis D no está automatizado. Pero poco a poco se comienza a implementar la técnica de diagnóstico basada en el test reflejo Gracias a la misma, con la misma muestra con la que diagnostican a alguien por primera vez de hepatitis B, se observa también si padece hepatitis D. Esta
nueva técnica “permite ahorrar tiempos y agiliza el diagnóstico porque se consigue una automatización de todo del proceso”, concluye Sabela Lens.
Cabe destacar que esto hace más fácil acortar el proceso de diagnóstico y así, decidir el tratamiento ya que “con el test reflejo puedes diagnosticar la presencia de infección activa en un mismo estudio” y, además, “con realizar esta prueba una vez en la vida, en ausencia de factores de riesgo, es suficiente”. Aunque, “e
s una tecnología fácilmente aplicable dentro de un laboratorio de microbiología de un hospital”, hoy en día solo está disponible en algunos centros hospitalarios de referencia. No obstante, “en el futuro estará disponible en todos los centros, sobre todo, porque no requiere de una gran tecnología”, finaliza